Este miércoles, el Gobierno Nacional hará pública la convocatoria de la XI Ronda Petrolera. Se licitarán 16 bloques en el suroriente, en las provincias de Pastaza y Morona Santiago. Tres bloques serán exclusivamente para empresas estatales y 13 para empresas de participación privada o estatal.
La incorporación de nuevos campos es de vital importancia para el Ecuador, ya que a mediano plazo enfrentamos un problema de agotamiento de nuestras reservas de petróleo. Desde 2003 el país mantiene una tendencia decreciente. Si hace 9 años las reservas probadas eran de 5 060 millones de barriles, en 2012 son de aproximadamente 3 356 millones de barriles. Si tomamos en cuenta que nuestra producción anual de petróleo bordea los 188 millones de barriles, nuestras reservas se agotarán en aproximadamente 19 años.
De ahí la importancia de esta XI Ronda. La idea es que la frontera petrolera se extienda hacia el suroriente y en un horizonte de 7 años pueda contarse con mayor cantidad de petróleo.
No obstante, el trabajo hecho hasta el momento para incrementar las reservas ha sido insuficiente. Desde enero del 2007, el Gobierno actual ha consumido cerca del 22% de las reservas, 977 millones de barriles. La incorporación de nuevas reservas no ha llegado ni siquiera al 28% de ese consumo. La regla es que por cada barril extraído se incorpore un barril de reservas probadas y certificadas. A más del bajo nivel alcanzado por las empresas estatales, lo generado por las privadas ha sido prácticamente nulo.
El lanzamiento de la XI Ronda revierte esta tendencia, sin embargo, existen problemas de fondo. Por un lado, no hay un ambiente de confianza y de plena garantía para la inversión extranjera. El cambio relativamente frecuente del marco jurídico y contractual en el sector hidrocarburífero ha hecho que grandes empresas como Exxon, BP, Mobil y Conoco no tengan interés en Ecuador. Los juicios con Oxy, Perenco y Burlington dan un mal precedente para las nuevas inversiones.
Si el nivel de confianza en el país fuera otro posiblemente habría más empresas interesadas en participar. No obstante, esto depende también de la modalidad contractual. En esta ocasión el Gobierno promociona nuevamente contratos de prestación de servicios pero esto tampoco asegura una amplia participación.
Se prevé que en esta XI Ronda Petrolera haya mayor interés de las empresas estatales como Pdvsa, Ecopetrol, Petroperú, entre otras. Veamos entonces si las expectativas del Gobierno se cumplen y con la licitación de estos 16 campos –los cuales tienen una extensión de 200 mil hectáreas cada uno- se pueda ampliar las reservas de petróleo de 360 a 1500 millones de barriles.