Estamos en la recta final de la campaña. Los candidatos nos ofrecen mayores beneficios sociales. En las campañas no se habla de políticas económicas, que a las grandes mayorías no interesan, y las elecciones las definen las mayorías. Pero son las políticas económicas las que importan, en particular en Ecuador, que no tiene moneda propia.
Cuando teníamos el sucre, los candidatos podían ofrecer el oro y el moro y cumplir. Muy fácil. Si ofrecían un aumento de sueldos del 20%, devaluaban la moneda 20%. Con ello, el sueldo subía, pero no el poder de compra. Un alza mentirosa.
Hoy no es posible. Si el candidato promete subir el sueldo, y el gobierno cumple, los ciudadanos mejoramos nuestro poder de compra. Como somos un país de clase media, el dinero no va a comprar más arroz y papas, sino un mejor televisor, otro par de zapatos, quizá un carro aunque sea de segunda mano.
Todo eso es importado, o tiene insumos importados. Aumentan las importaciones. Si superan a las exportaciones, sale dinero de la economía. Si la situación persiste, escasean los dólares, la economía se estanca.
Hoy estaríamos en esa situación si no fuera porque el gobierno se endeuda desenfrenadamente en el exterior para traer plata. Pero ese recurso se va a agotar, y pronto.
Lo que se necesita para poder mejorar nuestro nivel de vida, es que entren más dólares que los que salen. Pero no por deuda pública. Que sea por exportaciones, negocios en que trabajan ecuatorianos, ganando dinero y produciendo algo que venden al extranjero. O también inversión extranjera: plata que viene de afuera y que si se invierte con éxito, genera empleo y riqueza, parte de la cual se va al exterior como utilidades; si no tiene éxito, quien pierde es el extranjero que arriesgó.
Es por ese apremio de lograr divisas que compensen las que se perdieron por la caída del precio del petróleo, que el Presidente finalmente nombró un Ministro de Comercio Exterior favorable a la firma del acuerdo con la Unión Europea. El acuerdo entró en vigencia este año. El arancel para el banano bajó fuertemente, desapareció la desventaja que tenía Ecuador en relación a Colombia y Costa Rica, y ya en enero recuperamos mercado perdido. En enero las ventas crecieron 23% en relación a enero del año anterior, cuando en 2016 cayeron 2.5%. En enero y solo en banano, aumentamos las ventas en USD 56 millones. Dinero que se reparte entre productores, exportadores, proveedores, y sus nuevos empleados. Divisas que permiten incrementar las importaciones.
El menor arancel beneficia a otros productos, en particular flores y camarón, pero como el cambio no es tan drástico, el incremento de estas exportaciones es más paulatino.
Fijémonos entonces, ¿Qué dicen los candidatos de las exportaciones y la inversión extranjera? De eso depende que cumplan sus promesas.