En 1974 tuve el gusto de entrevistar en Nueva York a la estrella del fútbol mundial y gran deportista brasileño Pelé cuando jugaba en el Cosmos, en el fin de su carrera.
Cuando le pregunté cuál es el requisito principal para llegar al éxito respondió en forma simple: primero ser humano, persona, responsable, sencillo y honesto.
El deporte ecuatoriano se empañó el jueves último cuando luego de una gran actuación de la Selección de fútbol, que ganara 3 a 0 a Chile, un destacado futbolista nacional fue visto corriendo de la justicia por miles de aficionados locales y en señal de TV.
Salió en ambulancia a pesar de tener una orden de prisión en firme por un problema familiar pendiente, con la complicidad de sus compañeros y técnicos y la lenidad de miembros de la Policía, llamados a cumplir la orden judicial.
La Policía dio una mala imagen cuando no le pudo tomar preso desde antes, más allá de su vida pública deportiva.
Para actuar en otros casos, con el ciudadano común, es muy diligente y a veces procede a empellones e incluso con violación de los DD.HH. Casos existen y algunos han sido sancionados.
Hay que recordarles que la Constitución, art. 158, dispone que las FF.AA. y la Policía son instituciones de protección de derechos, libertades y garantías de los ciudadanos.
¿Qué se puede esperar cuando en la actual concentración del poder el alto mando y consejo de generales se pronunciaran políticamente en respaldo al transitorio ministro del ramo (la institución queda), en medio de críticas por las irregularidades en el cobro ilegal en los pases de policías?
Decir que son obedientes y no deliberantes es hablar a medias una realidad cuando no se protegen los derechos y además dice la norma que se sujetarán al poder civil y fundamentalmente a la Constitución (art. 159), que por principio es de derechos y justicia de todos.
El art. 11 de la Constitución dispone que todas las personas son iguales y gozarán de los mismos derechos, deberes y oportunidades.
¿Por qué no lo detuvieron cuando existía desde hace varios días orden de juez competente, cuando había un apremio familiar y un arreglo pendiente por una de sus hijas? Todo se hubiese evitado si era responsable desde el comienzo y solucionaba oportunamente. También es censurable hacer negocio de la maternidad, abusar y utilizar a los hijos y no asumir las consecuencias posteriores.
Un llamado a los padres a ser responsables.
El futbolista está en la vitrina pública y expuesto a la crítica. El deportista es un ejemplo para la sociedad y con su actitud ¿qué está enseñando a niños, jóvenes y adultos?
Por eso estamos así y se dice que las leyes se acatan pero no se cumplen. Aquí funciona el vivo, el que impresiona y encanta con sus discursos, atropella todo, atrapa a la gente, que se enceguece con sus palabras altisonantes y no razona.