La situación venezolana se tensa . Dice Ramón Guillermo Aveledo que las elecciones al Parlamento del 26 de septiembre talvez las últimas que conozca el país. Aveledo, prestigioso abogado, escritor, ex presidente del Congreso, es el secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática, organismo que consiguió forjar un frente único opositor.
¿Qué ocurre? Chávez puede burlar los resultados. A un mes de las elecciones, según el experto Joaquín Pérez Rodríguez, la encuesta más fiable -Consultores 21- da el triunfo a la oposición por 52% a 42. Dato reforzado en otra indagación todavía más reveladora: al preguntarle a los electores si quieren a Chávez o si lo rechazan, el 37% dice que le gusta y el 56% afirma que no le gusta. Una diferencia de casi 20 puntos.
La popularidad de Chávez se hunde por al menos 5 razones:
• Venezuela es un matadero con más víctimas que Iraq, contó el New York Times. Casi 120 000 personas asesinadas desde que Chávez ocupa el poder. La violencia se cuadruplicó.
• La sociedad detesta a las bandas armadas del Gobierno (Los guardianes de Chávez, como les llamó CNN en un documental que estremeció), instrumento represivo que encamina a Venezuela hacia un modelo socialista rechazado por el 66% de la población.
• Los venezolanos perciben que no hay ningún país peor gobernado en Sudamérica, pues pese a recibir un torrente de petrodólares este es incapaz de abastecer los mercados, conservar bien los alimentos, mantener las infraestructuras o equipar medianamente los hospitales.
• La ocupación cubana y los subsidios al resto de la famélica familia del socialismo del siglo XXI con que Chávez compra importancia internacional y fomenta el mayor nivel de corrupción que haya conocido la nación.
• La desaparición del Estado de Derecho y el desamparo de la sociedad con jueces que sólo responden al poder político, con cuerpos policíacos que no detienen a los criminales, sino a los adversarios políticos.
¿Qué hará Chávez si sus adversarios consiguen mayoría? Los opositores temen que desconocerá los resultados. ¿Cómo? Fabricando un guión de fraude con alguna compañía de encuestas controlada por el Gobierno: presentar cifras de opinión positivas a Chávez; un ‘exitpoll’ favorable a esa encuesta y, en la noche, el Consejo Nacional Electoral daría números finales -obtenidos electrónicamente- parecidos a los de la falsa encuesta y el falso ‘exitpoll’.
Por eso Aveledo dice que pudieran ser las últimas elecciones. Si los venezolanos se dejan robar la victoria, la conclusión de los demócratas sería que no vale la pena participar en comicios amañados. “¿Pueden evitar la estafa?”, le pregunté al ex embajador de Venezuela Thor Halvorssen: “Sólo si salen a votar masivamente y si están dispuestos a defender sus votos en las calles a cualquier precio.