Se piensa que, con los avances tecnológicos, los procesos electorales se vuelven más transparentes y confiables, que con más computadores y programas informáticos se evita el fraude. Pero no siempre resulta ser así. A veces la tecnología empaña los resultados electorales y se vuelve instrumento de manipulación.
Como para la mayoría de la gente la computación y su manejo son temas tabú, sobre los que no se puede ni opinar, quienes las controlan pueden inducir resultados, modificar cifras y ocultar realidades. Esto último sucedió, al parecer, en el manejo del Consejo Nacional Electoral (CNE), antes de que fuera reorganizado por el Consejo transitorio presidido por Julio César Trujillo.
En efecto, un examen de Contraloría ha determinado muchas irregularidades en la legalización de organizaciones políticas por el entonces CNE. Se determinaron 24.470 firmas de adherentes repetidas en los formularios de la misma organización. 6.648 ciudadanos fallecidos y 1.527 menores a 16 años.
Según la Contraloría, en el movimiento “Unión Ecuatoriana”, de un total de 158.369 adherentes, se estableció 1.273 registros con números de cédula incompleta, 6.137 de cédulas no válidas, 4 repetidos y 372 muertos. En el movimiento “Concertación”, de un total de 161.908 adherentes, 1.285 registros con números de cédula incompleta, 7.661 cédulas no válidas, 1.043 repetidos y 482 muertos.
En el movimiento “Justicia Social”, de un total de 175.462 adherentes, 154 registros presentaron números de cédula incompletos, 5.841 registros con cédulas no válidas, 2 registros repetidos; 76 muertos y 110 menores a 16 años. En el movimiento “Podemos”, de un total de 161.352 adherentes, 450 registros presentaron número de cédula incompleta, 11.014 registros con cédulas no válidas, 2 registros repetidos, 152 registros de muertos y 222 registros de menores a 16 años.
En el movimiento “Fuerza Compromiso Social”, cuyo líder está sentenciado por corrupción en el gobierno de Rafael Correa, quien terminó “comprando” la organización con la lista 5, de un total de 174.700 adherentes, 665 registros presentaron números de cédula incompleta, 12.427 registros con cédulas no válidas, 3.146 registros repetidos, 33 muertos y 16 menores a 16 años.
Siempre hay errores en los procesos de afiliación, pero las cifras que ofrece la Contraloría son altas y consistentes. Ha habido, al menos ligereza, cuando no la intención de legalizar organizaciones que no tenían respaldos y documentación en regla.
El Consejo Electoral tiene la obligación de presentar propuestas de reforma al “Código de la Democracia”, que corrijan las trampas que dejó impostadas el correísmo, y debe revisar y limitar los procesos de proliferación de movimientos políticos y, con tiempo, depurar seriamente el padrón electoral.