Es difícil referirse al Ecuador sin pasar- aunque sea por afuera – por un Laberinto similar al de Creta; o al revés; salir de esa confusión mitológica como lo hizo el héroe Teseo. Estos enigmas o misterios fueron difíciles de resolver en esa edad mitológica, como tampoco lo es la tragicomedia en que transita el proceso de las elecciones del 2017.
Un resumen puede servir para encontrar una explicación o un calmante para esos días- El Consejo Nacional Electoral se había portado de manera aceptable hasta que suspendió la información cuando las actas del conteo preliminar habían llegado al 88.8 %. Entonces se abrieron las puertas del laberinto: la corporación Participación Ciudadana con base en un muestro llegó a procesar el 95%; por lo que, a las 20:00 del domingo surgieron las sospechas de un fraude que se estaría fraguado cuando no se cumplió con el ofrecimiento del organismo electoral; cosa curiosa, no sucedió lo mismo, en ese momento, con los escrutinios de los asambleístas ni con la esotérica consulta popular, al extremo que los partidos y movimientos se descuidaron de vigilar esos escrutinios paralelos.
Se desconoce cuál fue el motivo político que presionó al organismo de control electoral para que suspenda la publicación de los resultados alegando “inconsistencias” El expresidente Osvaldo Hurtado recordó, en una entrevista en Ecuavisa, que algo similar sucedió con la elección como presidente de la República de Jaime Roldós y apareció el monstruo, pero disfrazado de “Mano negra”.
Siguiendo la ruta de la bifurcación, la oposición reaccionó y su protesta se concentró en los comicios principales, olvidándose de las legislativas. Para apoyar el enredo se conoce que a lo delegados de las partidos y movimientos no se les entregó la copia de esos escrutinios.
Dos interrogantes surgen de lo acontecido. Primero: si el oficialismo ha triunfado en el caso de la amorfa consulta donde supuestamente el 40 % del ecuatoriano aprueba que el funcionario público tenga su dinero en paraísos fiscales y que los escrutinios libres de los legisladores alcanzan casi las dos terceras partes, por qué pararon los escrutinio, levantando un avispero de protestas a nivel nacional.
¿Por qué temen de los resultados de la segunda vuelta electoral si mantienen incólume el poder luego de las tres elecciones, aun cuando las maletas de Carondelet ya estén en Bruselas?
En segundo lugar, ¿Cómo se podrá gobernaran al país, probablemente con un presidente de la oposición, y el resto del orden estatal en manos del gobierno saliente?
¿Estaremos condenados hasta a la eternidad con una confrontación extrema? El héroe griego Teseo logró eliminar al monstruo Minotauro. ¿ En el caso del Ecuador se repetirá la hazaña, o caeremos en sus garras a través de un gobierno de facto . ¿La segunda vuelta eliminará estas “inconsistencias” políticas e institucionales?