A partir de 1963 ejercí la docencia en la Universidad Central del Ecuador (UCE), durante 43 años hasta mi jubilación. Soy, pues, testigo de cargo de la acción devastadora de la barbarie que se impuso en las universidades públicas a partir de los años setentas y de la despreocupación de los gobernantes que se sucedían ante el desastre de la educación estatal en todos sus niveles. Resultaba una falacia la afirmación de un político que llegó a la presidencia de la República: “El país será lo que la universidad quiere que sea”.
De investigación científica poco menos que nada. Como el Estado no asignaba cuantía alguna para tal actividad, los contados investigadores realizaban proezas como la de lograr financiamiento de fuentes internacionales o extranjeras (grants) en dura competición con proyectos que presentaban investigadores de los países desarrollados.
Quien te vio: era la situación de la UCE, mi universidad y la de dos de mis hijos, también médicos.
Los nuevos tiempos llegaron cuando fue elegido rector el Dr. Édgar Samaniego en el 2009 y en el 2014 le sucedió el Dr. Fernando Sempértegui, hasta el presente. Catedráticos de reconocido prestigio, los dos. El Dr. Sempertegui, además, connotado investigador científico. Lo que tuvieron que vencer: una resistencia tenaz al cambio, y tanto como que el Dr. Samaniego sufrió un atentado que pudo costarle la vida. A la voluntad de cambio que se dio en la UCE vino a sumarse la decisión del Gobierno por hacer de la educación superior, la ciencia y la tecnología los motores que nos permitieran salir del pantano del subdesarrollo.
Quien te ve: Una visita de toda una mañana la que hice hace pocos días a la UCE. Son los indicadores de la investigación científica que se realiza, el objeto de mi atención. En todos los centros de investigación y docencia la informática se halla al alcance de profesores y estudiantes. Los laboratorios cuentan con equipos modernos que responden a las necesidades de las investigaciones. Los investigadores a tiempo completo (los más) cuentan con cubículos confortables. Todas las investigaciones se orientan a temas de interés nacional. Los resultados, ya utilizados con provecho en la industria y la agricultura. El 30% de los fondos que se disponen para investigación científica y tecnológica provienen de fuentes extrapresupuestarias nacionales y extranjeras. A más de las buenas revistas científicas que se publican, los resultados de los estudios realizados en la UCE han llegado a la máxima aspiración: ser publicados en ‘journals’ de prestigio mundial. De Director General de Investigación y Posgrado Ángel Guevara MSc., PhD. Luego de seis años de estudios e investigación en el Instituto Pasteur (Francia), su formación le permite impulsar la investigación científica en la UCE. El medioambiente invita al estudio.