En marzo 15 la Refinería del Pacífico convocó a ofertas para los trabajos de preparación del área de implantación de la refinería en Manabí.
El proyecto es colosal. Si es exitoso y es rentable para el país por los bienes que produzca y los servicios que ofrezca, será una gran contribución al desarrollo nacional.
De lo contrario será un peso muerto que nos impedirá avanzar.
Las autoridades tienen el deber de informar al país a cabalidad. Pero este Gobierno es generoso en propaganda y mísero en información. Nunca antes se ha sabido tan poco de un proyecto de tanta envergadura.
A pesar de ser una dictadura, las autoridades de los setenta informaban paso a paso sobre la construcción de la refinería de Esmeraldas, obra monumental para la economía de entonces. Igual cosa, Inecel con la hidroeléctrica Paute.
Sobre la Refinería del Pacífico lo que cabe es hacer preguntas.
Los presidentes Correa y Chávez lanzaron el proyecto con gran bombo y anunciaron que estaría listo en 2013. Que nada detendrá el proyecto, dijeron, y tildaron de conspiradores contra la refinería a quienes hacen cuestionamientos.
Más recientemente se indica que la producción de la refinería comenzará en 2016. O sea tomará 4 años desde el inicio de la preparación del terreno hasta el inicio de la operación.
Se anuncia se invertirán USD 11 700 millones. Según ciertas informaciones de prensa, Venezuela y Ecuador pondrán USD 3 000 millones entre los dos. Según otras, el país invertirá USD 3 600 millones, otro tanto Venezuela.
En todo caso, el mayor inversionista será un tercer socio.
Al fin, ¿cuánto en total invertirá el Ecuador, cuánto ya ha invertido, y cuánto ha puesto Venezuela de lo ya gastado?
¿Hay ya un nuevo socio? ¿Quién es? ¿Y si no hay nuevo socio, cómo pueden darse fechas para el inicio de la planta?
En noviembre 2010 se contrató a un importante banco japonés, Mizuho, para que consiga al socio y el financiamiento.
En febrero se anunció la contratación de una firma australiana, WorsleyParsons, a un costo de USD 240 millones para que supervise el proyecto y seleccione a los contratistas.
¿No le tocaría hacer eso al socio estratégico que busca (o buscaba) Mizuho? Acaso hay problemas en conseguir al socio que, a su vez, asuma el proyecto? ¿Habrá refinería si no se consigue el socio estratégico?
Luego hay el asunto del crudo. La refinería en Balao se encuentra en proceso de recuperación, obra esa sí de gran necesidad.
¿Hay suficiente crudo para ambas, Balao y Pacífico? ¿Refinará Pacífico crudo venezolano? En cuyo caso, ¿le compraremos crudo a Venezuela, o maquilaremos para PdVSA? De ser así, ¿se ha negociado el margen que cobraría la refinería por el servicio?
En lo que respecta a la refinería del Pacífico, hay más preguntas que respuestas.