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Una gran labor

Ser ex Jefe de Estado no es una profesión. Quizá puede decirse que es una condición, pero muchas veces puede convertirse en un problema. A veces se espera mucho de los ex gobernantes. Por ello, algunos de ellos, Isidro Ayora y Guillermo Rodríguez Lara por ejemplo, se separaron totalmente de la vida pública luego de ejercer el poder.

La mayoría, sin embargo, continuó en la política, unos en forma activa -hasta como candidatos o funcionarios- otros al menos como observadores.

Pero un político destacado, sobre todo un expresidente, cuando no está en una función pública no puede dedicarse exclusivamente a la política. Por ello, en otros países, una alternativa es que el personaje promueva una institución de corte académico o de cooperación. La Fundación Carter es un buen ejemplo. Aquí en nuestro país, Osvaldo Hurtado tomó esa alternativa y promovió, al final de su administración en 1984, la formación de la Corporación de Estudios para el Desarrollo, Cordes, cuya presidencia ha ejercido desde entonces.

Para el directorio de Cordes, Osvaldo Hurtado convocó a varias personalidades del país y para el trabajo de la Corporación contó con la colaboración de algunos profesionales destacados. Allí ha podido ejercer su vocación de trabajador de las ciencias sociales y también hacer propuestas desde su perspectiva.

En estos 30 años, Cordes ha trabajado y publicado sobre diversos temas de interés nacional. Uno de ellos fue la búsqueda de un acuerdo pacífico de la cuestión territorial con el Perú.

Cuando ya se arregló el problema y sentimos los beneficios de las buenas relaciones con el vecino del sur, parecería que el asunto no era tan complicado. Pero se necesitó mucho valor e imaginación para plantear un arreglo pacífico, cuando solo se hablaba de la “herida abierta” y de recobrar el Amazonas por las armas.

Cordes ha trabajado también sobre temas de comercio exterior e integración, cuando esta última cuestión, tan crucial para nuestro país, ha sido objeto de tanta palabrería y de tan pocas realizaciones y avances. Uno de los asuntos que la Corporación ha tratado persistentemente es la relación entre democracia y “gobernabilidad”. En todo caso, siempre ha tratado de aportar nuevas interpretaciones y promover el debate.

No siempre las propuestas de Cordes han sido aceptadas por todos. En no pocos casos, mas bien han sido polémicas. Personalmente, siempre discrepé, entre otros, de su enfoque sobre “gobernabilidad” que, a mi juicio, trataba de detener la protesta popular y volver al país un sujeto más eficiente de las medidas de ajuste que se le aplicaron por años. Pero en la perspectiva de tres décadas, los resultados de su extenso trabajo hablan por sí solos y no cabe duda de que su aporte ha sido muy positivo. Congratulaciones por el aniversario.