¿Qué es un paciente?
Columnista invitada
Según la Academia de la Lengua, es “tener paciencia....Según otras versiones, el origen es latino “pati” que quiere decir “...el que sufre...” Yo diría que ambas definiciones encajan... El paciente tiene que tener una paciencia infinita ,porque además de estar nervioso, retorcerse del dolor tener escalofríos y fiebre, o estar fracturado en pedacitos o chorreando sangre tiene que aguantarse que en los centros de salud, hospitales, clínicas o similares lo traten como a quien ha perdido toda dignidad, y que queda, irremediablemente a merced de los diminutivos... sin escape posible... sin derecho a protestar ni a decir ni pío.
Me explico, el paciente, el que sufre, el que espera ayuda, diagnóstico, tratamiento, lo que sea ingresa... y la enfermera(o) de turno inmediatamente le dice,-si se trata de un examen de sangre- ... “Deme su bracito, para buscarle la venita que le voy a meter esta agujita”. Si se trata de una radiografía, ecografía, mamografía, optometría, o algo similar... “deje su ropita, y cúbrase con la batica... alce, los bracitos, quédese, quietica, no mueva los piecitos...” Si el paciente es de cirugía...”colóquese el gorrito, ... etc. Al despertar escucha entre gallos y medianoche... “abra los, ojitos..., más tarde le traemos un juguito...”
Si ya está la habitación, a cualquier hora del día o de la noche alguien irrumpe como un vendaval agarra sin compasión el bracito, mide los signos vitales y desaparece. Durante el día llevan la bandeja con el desayunito, el almuercito o la comidita y un juguito. Ni modo, el paciente entra al exclusivo universo del diminutivo...
Si. El reino del diminutivo... Lo curioso es que en este universo no entran los médicos...Los de bata blanca hablan en normal... El brazo es brazo...el tumor es tumor...la vena es la vena...el pulmón sigue siendo un pulmón...Jamás dirían “aparece en la plaquita un tumorcito en su pulmoncito”. Ni de vainas...Ellos no.
Personalmente, yo como paciente, la que sufro además de la dolencia, es un ataque de hidrofobia, o peste de rabia, que me lleva a hacer esfuerzos sobrehumanos para entregarles sumisamente mi venita y mi bracito... y dejar quietos los piecitos... Puja por salir esa bestia humana que todos llevamos dentro... Y creo que a la mayoría de los que hemos o seremos pacientes, nos molesta este trato servil, diminutivo, muestra hipócrita de una falsa compasión .Abogo por que las directrices de, los centros hospitalarios, de todos los niveles, prohíban este trato...La próxima vez que ingrese como paciente le voy a preguntar a la de turno que por qué no le busca la venita a su mamacita pare clavarle la agujita.....
He llegado a creer que para el personal intermedio hospitalario no existen seres humanos individualizados... somos miles y miles de fichas que llaman por un altavoz. Y. lo, único que distinguen ellas o ellos son bracitos, piernitas, venitas, sin nombre propio.