El periodismo turístico en Internet empezó hace 20 años con webs especializadas en noticias sobre destinos, aerolíneas, hoteles, agencias, mayoristas, cruceros, tecnologías, entrevistas a empresarios del sector, estadísticas, ocupación, etc, que se difundían por emailing.
Luis Mesalles era en ese entonces el gurú de este tipo de periodismo en España. Intenté imitarlo pero nadie aquí generaba información turística así que rellene mi boletín con noticias de otros países y sin quererlo había creado un informativo internacional especializado que se tradujo en muchas invitaciones a diferentes países.
Desde hace 10 años las webs empezaron a ser desplazadas por las Redes Sociales, que permiten de forma barata y efectiva llegar al turista que se busca por rango de edad, ubicación o sexo y compiten por captar el dinero de todo tipo de negocio, incluso de los famosos, que con una inversión de 5.000 a 10.000 dólares más material sugestivo, pueden alcanzar el primer millón de “followers”, decirse “Influencers” y cobrar por ir a sitios turísticos o vestir una marca de ropa.
Los gobiernos seccionales hoy sí generan noticias y videos turísticos que casi nadie lee o ve, pues no usan los canales correctos y muchos buscan más promocionar la reelección de alcaldes y prefectos que sus atractivos geográficos.
Una de las televisoras incautadas podría servir de canal temático para difundir los miles de videos que transpiran polvo en los Gobiernos Autónomos Descentralizados, Gads, para capacitación continua de los niveles operativos y medios e incluso, para que el Ministro en funciones difunda sus políticas y procesos de un sector que no genera grandes titulares, al menos no en la forma como se administra actualmente. La mayoría de radios comunitarias quedan descartadas de la promoción y educación turística ya que no sobrevivieron la administración.
Al final del día, Ecuador sigue sin un Periodismo Turístico técnico que vaya más allá de mostrar paisajismo, degustar comida local o vivencias de los pueblos autóctonos.
Se agranda el vacío informativo sobre número real de visitantes, cantidad de plazas hoteleras legales e ilegales, nivel de ocupación, aporte al PIB, inversión nacional en el sector, cantidad de empleo ofertado, porcentaje de negocios que quiebran y un largo etc. a nivel local, regional y nacional.
En turismo andamos a ciegas o peor, llenos de cifras falsas, premios dudosos y desde la sociedad civil nadie da información fidedigna, procesada y con periodicidad, solo conozco un periodista especializado en turismo en el país y no hay una publicación que con números reales nos diga cuánto hemos retrocedido en los últimos 11 años, una vez que se evapora la nube tóxica socialista.
El Mintur intenta llenar en algo los vacíos, pero es un ministerio que de millonario regresó a ser el más pobre.