En estos tiempos de pestes bíblicas, incendios gigantescos, insurrecciones vandálicas, caudillos impulsivos como Trump o crueles como Putin y entrenadores de fútbol ausentes como Cruyff, las pitonisas andan a la orden del día porque sociólogos y economistas no dan pie con bola. Aunque no hace falta ser clarividente para advertir que, dado nuestro sistema de salud saqueado y con la actitud indolente del “no pasa nada”, cuando el coronavirus llegue al Ecuador lo único que cabe desear es que Dios nos coja confesados.
No se diga cuando retornen a ejercer su venganza los jerarcas fugitivos del correísmo que ahora se fotografían sonrientes y relajados en su exilio dorado de México, donde el capo que los visita ha anunciado que liberarán a todos los “perseguidos políticos” condenados injustamente y serán implacables con “los traidores”.
Y así como prepararon células con tácticas de guerrilla urbana para el fallido golpe de octubre, es de suponer que formarán grupos de adoctrinamiento para alertar sobre el calendario según el modelo siguiente donde el conductor pregunta: a ver, compitas, ¿cuáles son los enemigos históricos de la revolución, más siniestros que el coronavirus? Grita el primero: “¡El imperialismo yanky”. Bien. ¿Cuál más? “El neoliberalismo y el FMI que quiere quitar el subsidio a la gasolina de los ricos”, exclama otro. Al diésel de los pobres, querrá decir. “Ah, ya”.
¿Quién más? “¿El Partido Socialcristiano?” Frío, frío, ese es nuestro aliado. “¿La corrupción?” Carcajada general. Buen chiste, compa pero la respuesta correcta es el año bisiesto, que fue instituido por el Imperio Romano y desde entonces es el año favorito de los reaccionarios. Vean no más que todos los presidentes de EE.UU., desde Washington hasta Trump, han sido elegidos en año bisiesto, religiosamente cada cuatro años.
Siguiente: ¿quién inventó el neoliberalismo? Replican los compas: “¿El Bolillo Gómez? ¿Alberto Dahik? Los Rolling Stones?” La respuesta es: Milton Friedman y sus Chicago Boys. Como no podía ser de otra manera, Friedman nació en año bisiesto: 1916.
¿Y cuándo se creó la institución más perversa de la humanidad, el FMI? Silencio. Pues el Fondo Monetario nació con los acuerdos de Breton Woods en el bisiesto de 1944. Y hablando de esa época, ¿quién fue el peor enemigo del movimiento estudiantil? “¿Los chinos de la U?” Caliente. “¿Velasco Ibarra?”. El mismo. Solo la primera vez no llegó a Carondelet en año bisiesto. En 1940 ganó las elecciones pero los liberales le hicieron fraude. Volvió el 44 con La Gloriosa. Luego, con golpes de Estado y Constituyentes de por medio, fue electo el 52, el 60 y el 68. Todos bisiestos.
De yapa, León Febres Cordero triunfó en año bisiesto pero como era socialcristiano como el compa Alexis Mera, mejor nos hacemos los giles.