A estas alturas todos sabemos que no podemos devaluar. En realidad, lo sabemos desde el 2000. Por lo tanto, desde ese año, las políticas económicas debieron diseñarse pensando en que no se puede devaluar. Pero desde hace un tiempo se olvidaron de ese detalle.
Y esto es especialmente evidente en la inflación que ha sufrido el país desde que estamos dolarizados. Porque entre 2003 y 2007, nuestra inflación estuvo bajo control, por debajo de la colombiana e incluso por debajo de la norteamericana, con lo cual se demostró que en el Ecuador dolarizado sí se podía tener menos inflación que en Estados Unidos, el emisor de los dólares.
Pero la cosa cambió desde mediados del 2007, fecha en que el Gobierno ecuatoriano comenzó a gastar la plata a manos llenas y empezó a implementar otras políticas que también nos encarecieron. Desde mediados del 2007, los precios en el Ecuador han subido más que en Colombia y en Perú y muchísimo más que en EE.UU. En otras palabras, algo hicimos bien hasta el 2007, algo hicimos mal desde ese año.
Veamos los números, primero de cuando lo hicimos bien. Entre enero del 2003 y junio del 2007, los precios en el Ecuador subieron 13%. Es decir, si en enero 2003 la canasta familiar costaba 100, en junio 2007 costaba 113. Lo interesante es que en el mismo período el aumento acumulado de precios en Colombia fue de 27% y en Estados Unidos 15%. Eso significa que en esos años el Ecuador se abarató frente a esos dos países. De nuestros principales socios, solo el Perú acumuló menos inflación con 11% (lo que tampoco es una diferencia tan grande).
Por cierto, si se está analizando la inflación desde enero 2003 es porque, más o menos, en esa época se estabilizaron los precios luego del caos post-dolarización.
Pero todo cambió desde mediados del 2007, cuando el gasto público empezó a dispararse y las trabas a la economía nos empezaron a volver más caros. Entre junio 2007 y junio 2015, en el Ecuador los precios subieron 45%, mientras que en Colombia subieron 33%, en Perú 30% y en Estados Unidos 15%. O sea, estuvimos 12 puntos por encima de Colombia, 15 por encima de Perú y 30 por arriba de EE.UU., es decir, nos encarecimos bastante más que ellos.
Es como que se olvidaron que no podíamos devaluar. Y ahora, oh sorpresa, el país es caro, poco competitivo y hay que poner trabas a las importaciones, vayan a invadirnos esos perversos productos más baratos que los nuestros.
El gran problema es que buena parte de esa pérdida de competitividad la causamos nosotros mismos, con un gasto público desmedido, con trabas que vuelven caro producir y aumentos salariales por encima del aumento de la productividad.
Pero el Ecuador nunca estuvo condenado a esto. Entre 2003 y 2007 se demostró que era posible estar dolarizados y ser competitivos. Lo malo no es la dolarización, son las políticas.
@VicenteAlbornoz