Gerardo Villacreces Carbo

¿Existe el silencio electoral…?

Las elecciones derivan en una suerte de peculiar y corta “biografía política” manifestada desde la tarima (sea física o digital), diseñada milimétricamente por el estratega de campaña, empeñado en presentar la conveniente y mejorversión del candidato, presentándolo como confiable, consistente, preparado, cumplidor de la ley, disimulando  sus puntos débiles; y, a la vez disparando desde dicha tarima lo peor de la otra parte, reservándose para el último los temas más comprometedores, a fin de dejar sin tiempo de defensa al contendor y, al elector con la duda delaludido. 

Muchos, y principalmente las nuevas generaciones -importantes decidores - ya no ven tv ni leen medios impresos, enfocando su atención y tiempo en plataformas y medios digitales, que están en todo momento a su alcance a través del móvil. 

El silencio electoral, evidentemente necesario, fortalecido por la ley seca, busca generar un momento de silencio del ruido electoral, del alto tráfico sino congestionamiento político, a fin de que la mente descanse, reflexione con tranquilidad, y de esta manera pueda el elector honrar la democracia con un voto sensato. En tal virtud, el art. 207 del Código de la Democracia, expresamente prohíbe durante el silencio electoral, la difusión de publicidad, opiniones, imágenes en todo tipo de medios de comunicación y medios digitales; así como la realización de concentraciones y cualquier otro acto de campaña, que induzcan a los electores a votar por tal candidato.

Evidentemente, los medios digitales comprenden también las redes sociales, páginas web, videos digitales, etc; mientras que las concentraciones ya no son solamente físicas, sino también virtuales. En el derecho público, solamente se puede realizaraquello que la ley expresamente faculta; consecuentemente estando regulados los procesos electorales por el Estado y siendo normados por disposiciones de derecho público, la iniciativa o interpretación privada está restringida. Es claro que, el espíritu de la ley es prohibir todo tipo de campaña electoral durante el silencio electoral, respetando un espacio para el elector, a fin de que pueda meditar su voto sin ningún tipo de influencia, mas allá de su conciencia e inteligencia. 

Infortunadamente, bajo el forzado criterio que le ley no dice “redes sociales” pese a que dice “medios digitales” y que su espíritu es claro, hemos visto en la primera vuelta que en el internet se pautó por publicidad electoral en los días de reserva electoral en la zona geográfica digital que corresponde al Ecuador, pauta pagada y vigente hasta el día del sufragio; cuando la ley no contempla, como es lógico, ninguna salvedad ni excepción al respecto.  Evidenciándose una inconsistencia entre la mejor versión de los candidatos cumplidores de la ley presentados en la tarima vs la inmediata realidaddesde la misma tarima, en la cual, en un temasensible e importante, a través del internet se habría eludido sino evadido la ley flagrantemente. Todo lo cual, a vista y paciencia de la “autoridad” electoral, a nombre de la viveza política y, en perjuicio del buen juicio de los electores…