Luis Montaluisa
Ética, ecumenismo y paz
El 28 de octubre de 2023 se recordará los 25 años en que los presidentes Mahuad y Fujimori firmaron la paz entre Ecuador y Perú. Para mi generación, la paz parecía un imposible. Se había posicionado en la mente de ecuatorianos y peruanos, la creencia de que éramos enemigos históricos. Al principio, pocas personas mirábamos las ventajas de la paz, más allá de los discursos convencionales. Finalmente, presidentes, políticos y los pueblos llegamos a un consenso por la paz. Esto evitó el gasto inútil en compra de armas, etc. A propósito de este acuerdo de paz, la juventud requiere, reflexionar sobre los caminos posibles para que la humanidad busque equidad social de manera pacífica: ética y ecumenismo.
La ética es una espiritualidad que promueve el respeto a las otras personas, simplemente porque son seres humanos igual que cada uno de nosotros. El respeto no está sujeto a premios, castigos, ni aquí ni más allá. Basta una consciencia cósmica para sentir que todos somos seres frágiles y transitorios que nos necesitamos unos a otros. Hay que evitar endiosar a charlatanes de derecha e izquierda, opresores y asesinos, que se adueñan del poder para perpetuarse.
Otro modo de espiritualidad son las creencias religiosas. Pero, los denominados libros “sagrados” deben ser estudiados a la luz de la semiótica y la hermenéutica para evitar fanatismos. No son libros históricos. Son literaturas construidas por pueblos de su tiempo en búsqueda de convivencia entre las personas. Estas creencias, requieren caminar hacia el ecumenismo. El teólogo Hans Küng, autor de estudios sobre el origen de las religiones monoteístas: judaísmo, cristianismo, islamismo; dice “No habrá paz entre las naciones si no hay paz entre las religiones. No habrá paz entre las religiones si no se estudian los fundamentos”.
Referentes para el camino de paz son: Francisco de Asís, Gandi, Mandela, algunos líderes indígenas y afros, etc.