Luego la de agitado encuentro convocado por la dirección de Pachakutik, que concluyó con un enfrentamiento, muchos pensaron que ya no había posibilidad real de un agrupamiento político para las futuras elecciones en el campo de las organizaciones sociales y los grupos progresistas. Pero este miércoles 23 de marzo ese fantasma fue conjurado. Se realizó con éxito una reunión convocada por el Colectivo Unitario Nacional de Trabajadores, Indígenas y Organizaciones sociales con el fin de discutir un plan para enfrentar la crisis, los lineamientos de una propuesta de gobierno y la gestación de un frente electoral.
La reunión se desarrolló con un activo debate y con muchas coincidencias y acuerdos. Fue dirigida por el presidente del FUT, Pablo Serrano, y por el presidente de la Conaie. Concurrieron delegados de todas las organizaciones del Colectivo, de Unidad Popular, Concertación, MRT, Socialismo Revolucionario, Montecristi Vive, Partido Comunista del Ecuador. También asistieron algunos invitados a título personal y varios dignatarios de elección popular.
El boletín emitido al final de la reunión expresa: “En más de cuatro horas de diálogo se expusieron varios puntos de vista y se asumieron varios compromisos, entre ellos, mantener el espacio de diálogo, estructurar un acuerdo programático básico que será enriquecido con un amplio debate e ir definiendo un mecanismo para consolidar el frente electoral y definir candidaturas. También se convino ampliar la convocatoria a otros sectores políticas y organizaciones, a base del contenido del programa”.
Se informó también que se resolvió en forma unánime “realizar una consulta a las bases sociales en las provincias para definir las bases de el acuerdo nacional. Se designó una comisión representativa para que trabaje en una propuesta de programa de gobierno y de línea estratégica que defina un camino para la designación de candidaturas. Se resolvió convocar a una nueva reunión ampliada para el mes de abril. Mientras tanto, la comisión preparará los materiales que será la base de las definiciones que se tomarán entonces”.
Un compromiso fue participar en las movilizaciones y las acciones de lucha programadas en el mes de abril y en especial en la movilización del 1 de Mayo. Se acordó también respaldar la acción y la ampliación de las labores de la Comisión Anticorrupción, que cumple su función en medio del acoso gubernamental.
En el pasado se han formado frentes, se ha consensuado un programa, pero han surgido rupturas el momento de la designación de candidatos. En esta ocasión parece que ese peligro se ha superado, dado que nadie ha puesto candidaturas como condición para participar y hay una genuina voluntad unitaria que impedirá rupturas. Buen comienzo para un proceso que será complejo, pero sí ofrece una alternativa.