Un trabajo periodístico publicado por este Diario deja en claro que los ediles de Quito coinciden en que la fórmula que se usó para el avalúo predial en el 2018 tuvo errores, y que el esperado proceso de reavalúo debe simplificarse.
El Concejo Metropolitano, en función de lo que manda el Código Orgánico de Organización Territorial, actualizó los avalúos. Es lo mismo que sucedió en varias ciudades del país, pero las alzas no provocaron la desazón que causaron en la Capital, ni tampoco fue necesario emprender un proceso de reavalúo como el que se ha ofrecido.
Si bien se puede coincidir en el objetivo de acercar el valor de los predios a los valores comerciales, es difícil en cambio entender que en varios casos los primeros superen a los segundos. Se sabe de predios en los cuales hubo subidas de hasta tres veces el valor que estaba vigente. El mismo hecho de que se haya iniciado un proceso de revisión es una manera de admitir que el trabajo no fue hecho a cabalidad y que quizás solamente primó el criterio comercial, lo cual no tiene sentido cuando el sector inmobiliario viene atravesando una situación compleja.
Hasta ahora solo se ha revisado el avalúo de 14 263 predios, una cifra mínima. Hay acuerdo entre la mayoría de los concejales en que se debe buscar una solución efectiva al problema creado, e incluso se cuestionan las metodologías de valorización. El Concejo Metropolitano es responsable y debe hallar una salida. Más vale tarde que nunca.