Ayer se dio un paso importante para reanudar la producción en el sector formal de la economía nacional. Las industrias de Cuenca recibieron la autorización para reactivar sus operaciones, un ejemplo que pronto se replicará en otras ciudades del país.
Cuando se cumplen dos meses de cuarentena, la economía del país ha caminado a dos ritmos. El primero se ha caracterizado por la proliferación del comercio informal en las calles, donde los controles para restringir la movilidad han sido superados por la necesidad de la gente por salir a trabajar y obtener algún ingreso.
El segundo corresponde al sector formal, donde las pérdidas han aumentado con cada día de aislamiento. En los 60 días de cuarentena, el impacto en la economía nacional ya bordea los USD 12 500 millones, considerando que el 70% del aparato productivo se encuentra paralizado.
Para superar esta situación, el sector productivo cuencano ha trabajado de cerca con el Comité de Operaciones de Emergencia nacional (COE) para conseguir la aprobación de los protocolos de bioseguridad en sus industrias, pero también se ha comprometido, en un acuerdo con el Municipio, para hacer pruebas rápidas de covid-19 a los empleados que se reincorporen a sus labores.
Hasta hace poco el país se encontraba ante la disyuntiva de abrir la economía para evitar el desempleo o mantener el confinamiento para evitar nuevos contagios.
Ahora, el trabajo entre autoridades del Gobierno, del Municipio de Cuenca y el gremio industrial de esta ciudad puede ser la fórmula para encontrar el punto de equilibrio y resolver la disyuntiva entre abrir la economía o alargar la cuarentena.
En los próximos días se prevé que más municipios flexibilicen las restricciones a las actividades productivas formales, lo cual dependerá de un análisis particular de cada ciudad.
La apertura de la economía debe ser paulatina, ordenada y progresiva. De por medio está la salud de los trabajadores y de la población, la cual también depende de la salud de la economía, que en la actualidad padece de un 60% de informalidad.