En una ceremonia cumplida en Bogotá, conocida como ‘World Travel Awards’, la ciudad de Quito volvió a ser distinguida.
Somos una vez más en este año, destino líder de Sudamérica. La idea es divulgar este premio y proyectarlo para potenciar el número de visitantes extranjeros, que a su vez fortalecen la imagen de la capital de los ecuatorianos y de todo el Ecuador.
Pero un premio de esta naturaleza nos compromete a todos. Debemos trabajar mancomunadamente para hacer de Quito, no solo esa Ciudad para Vivir que reclamaba un lema de hace algunos años, sino una ciudad amable para los visitantes del país y del exterior.
El potencial de Quito es enorme pero los problemas de seguridad y ornato siguen vigentes. Hace unos años y con un esfuerzo sostenido se logró ordenar a los comerciantes informales, se acordó una vigilancia permanente de los puntos clave y se colocaron guías y policías en puntos importantes.
Alguna anterior administración municipal logró mantener a los sitios emblemáticos limpios y con una puesta en escena agradable. El escenario del Quito monumental, sus iglesias coloniales, retablos y naves arquitectónicas llaman la admiración de los nativos y extranjeros.
Hace falta mejorar y crecer la oferta gastronómica en función de la diversidad de platos de nuestra cultura ancestral y mestiza.Es ideal potenciar la calidad de servicio y mejorar la oferta para acoger a miles de visitantes. Su voz y sus recuerdos serán una mejor y gratuita propaganda.