Represión en Venezuela
Venezuela profundiza su ya larga crisis. Ayer, una manifestación de la oposición, que marchaba rumbo a la Asamblea Nacional, fue reprimida duramente.
El propósito de la marcha era exigir un juicio político para que el primer poder del Estado, que es el Legislativo, destituyera a los magistrados que la semana pasada se permitieron dejar sin funciones a la Asamblea Nacional.
La decisión de una sala del Tribunal de Justicia causó una avalancha de críticas de la oposición, del Presidente de la Legislatura y de la comunidad internacional. Los denunciantes hablaron sin ambages de golpe de Estado.
El Tribunal Supremo de Justicia revirtió el último fin de semana la orden descabellada, pero la pretensión ya había producido efectos perniciosos dentro del estado de derecho.
La Organización de Estados Americanos (OEA) declaró el lunes que en Venezuela se produjo una grave alteración inconstitucional, en una agitada sesión con la protesta de Venezuela y sus aliados, Bolivia y Nicaragua, que abandonaron la sala por cuanto la conducción de la sesión no estuvo a cargo del titular sino de un presidente subrogante. La convocatoria corrió a cargo de 20 países miembros.
Ayer, en Caracas, Tomás Guanipa, del Partido Primero Justicia, y Lilian Tintori, esposa del ex candidato presidencial condenado por la justicia controlada por el Gobierno, denunciaron la represión de huestes paramilitares pro oficialistas. El final no se avizora.