Los trabajos se aceleraron para adelantar la entrega de la obra y habilitar la Panamericana Norte antes del feriado que se vivirá en el país durante este largo fin de semana.
Esta vía, importante para comunicar la capital con todo el norte de la región Sierra, se cerró a raíz de los sismos que afectaron a la capital y a los alrededores del epicentro, en el sector nororiental.
Entonces, y ante los deslizamientos de tierra que complicaron el paso, la autoridad, con buen criterio, decidió cerrar un tramo de la Panamericana.
La consecuencia tuvo severas afectaciones para la economía de Guayllabamba -comercio, turismo- y de otras poblaciones del norte de Pichincha y del país.
Las rutinas de miles de personas, que a diario se movilizaban desde y hacia Quito por motivos de trabajo, estudios, negocios o tramitología , también cambiaron de modo considerable.
La idea del Gobierno era apuntalar los taludes, habilitar el tránsito en condiciones de plena seguridad y, adicionalmente, empezar la construcción de un trazado que evitara una zona que ha mostrado su evidente fragilidad.
Durante el feriado, miles de automóviles pasarán por allí. Se recomienda prudencia especial debido la falta de señalización de la ruta habilitada de modo provisional para el feriado. Es indispensable que los conductores colaboren con la autoridad. La coordinación de la Agencia Nacional de Tránsito con la Agencia Metropolitana, la Policía y los agentes es un deber cívico que sin duda se cumplirá con responsabilidad.