Macron, Francia, Europa

Emmanuel Macron será en el próximo quinquenio el presidente de Francia. Es el más joven desde la V República.

Macron, banquero liberal, sacó más del doble de votos que su contendiente Marine Le Pen, del Frente Nacional. Muchos atribuyen el triunfo del líder de, ¡En Marcha! a un rechazo a la ultraderechista, más que a los votos propios del ex ministro de Economía del presidente socialista François Hollande.

Francia espera con prudencia y la nueva interrogante es el crecimiento de fuerzas radicales como los partidos de Le Pen y Mélenchon, populismos de izquierda y de derecha.

En Europa se festejó el triunfo de Macron, o al menos se sintió un alivio, frente a las aspiraciones de cuestionar el espacio Schengen o una posible salida de la Unión Europea, si ganaba la rival del presidente electo.

Pero hay conciencia, según los analistas en círculos de poder del viejo continente, que si Macron fracasa, la victoria de Le Pen podría ser la consecuencia previsible en cinco años más.

Si Francia decide en un quinquenio alejarse de la zona euro y de la propia Unión, la estabilidad del sistema monetario y la apertura del comercio y la integración, tan sutilmente labrados, correrían riesgo. Por ahora hay inquietud de conocer la posición francesa frente a los eurobonos o al superávit de Alemania. Ambas naciones son claves para la estabilidad. De su lado, la canciller Ángela Merkel dijo que el triunfo de Macron era espectacular.

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