Finanzas ejecutó el cobro de USD 41 millones de las cuentas del Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa). La entidad queda desfinanciada.
Luego de una ardua polémica, el Poder Ejecutivo recuperó la millonaria suma que fue producto de una venta perfeccionada entre dos entidades del mismo poder: los ministerios de Defensa y de Ambiente.
Al cabo de varios años, en enero, el Presidente causó un debate sobre los terrenos de Los Samanes que según su criterio fueron sobrepagados por el Ministerio de Ambiente al Issfa. Los militares pensaron antes en un plan de vivienda que no llegó a concretarse. Cuando la venta se cerró, a ninguna autoridad le pareció desproporcionada ni exorbitante la cantidad pagada. Ni siquiera la Contraloría intervino entonces en el asunto.
La disputa terminó en el relevo sorpresivo del alto mando militar, en febrero. El cobro realizado ayer es otro episodio que tensa la cuerda.
Finalmente se impuso el criterio del Ejecutivo, en una época de dificultades para la caja fiscal y cuando las demandas de préstamos del Issfa no pueden ser atendidas y se retrasan las cesantías.
La entidad reclama además un pago atrasado de USD 361 millones.
Los militares retirados han convocado a una marcha de protesta para hoy, por cuanto consideran afectado su patrimonio y su sistema de seguridad social, y sienten menoscabado su honor y su dignidad institucionales.