En dos años, la empresa que operará el ‘call center’ de las citas médicas del Seguro Social cobrará USD 20 millones.
Lo curioso de la noticia es que la contratación supone una vuelta al pasado. El sistema que antes manejó la asignación de citas médicas por el mecanismo de ‘call center’ fue el único que quedó al final de un proceso de subasta inversa en el que la entidad adjudicataria descalificó a las demás empresas oferentes.
Llama la atención que la firma calificada recibió críticas y en su contra se abrieron procesos administrativos y hasta juicios en las cortes.
Organismos estatales de control como la Procuraduría, la Superintendencia de Control de Poder de Mercado y la propia Contraloría General de la Nación emitieron observaciones al primer contrato de operación de esta compañía.
El sistema de citas a través de llamadas telefónicas empezó a operar en la Presidencia del IESS ejercida por Ramiro González. Fernando Cordero, que lo reemplazó como representante presidencial, estimó que el Seguro Social podía cumplir la tarea con el software de salud. ‘No dejaremos que una empresa tercerizada diga si hay o no turnos para atención médica’, declaró en su momento.
Fue entonces cuando las citas colapsaron y las quejas por el servicio, que existían anteriormente, se multiplicaron. A tal punto llegó la tensión que el sucesor de Cordero, Víctor Hugo Villacrés, consideró la concesión como ‘el menor de los males’. Hoy el proceso dejó a un sola empresa en carrera: la misma.