El Sangay recuerda la fragilidad del país

La erupción del Volcán Sangay, en la zona sur oriental, fue un punto alto en un proceso que lleva más de un año.

El domingo, el volcán lanzó una gigantesca columna de 10 kilómetros de ceniza que se esparció por seis provincias del país. Así, poblaciones de Chimborazo, Bolívar, Los Ríos, Manabí, Santa Elena y Guayas, amanecieron con una gruesa capa de ceniza que asustó a los pobladores.

En Chimborazo, poblados como Guamote, Pallatanga, Alausí, Chunchi y Cumandá sufrieron los mayores impactos. En esas ciudades la ceniza formó una suerte de niebla que sumía a los pobladores en incertidumbre y desolación.

La lluvia de ceniza sorprendió en la provincia del Guayas al llegar a Guayaquil, Daule, Milagro y Samborondón, entre otras localidades.

La mascarilla de uso permanente debido a la pandemia que azota al país ahora tiene también la función de proteger de la arena volcánica las vías respiratorias de las personas.

Quienes sufren enfermedades respiratorias crónicas deben tener especial cuidado. Las rinitis alérgicas y la afección a los ojos deben evitarse eludiendo el contacto con la ceniza.

Las áreas cubiertas de ceniza son tierras dedicadas a la ganadería y la agricultura. Como la experiencia nos acredita sabemos que los bovinos, ovejunos y las aves sufren estragos. La producción lechera se restringe.

Adicionalmente los sembríos pueden perder valor, y hay cosechas que no tendrán utilidad. Las plantaciones de banano también han sido cubiertas por capas de ceniza. Es un golpe más, en medio de una pandemia que ha causado muerte y pérdidas económicas.

En las ciudades el tráfico se ha interrumpido, igual que en tramos de carreteras. Se ha debido aplazar un partido de fútbol de campeonato. Varios locales comerciales y de restauración no pudieron abrir y la limpieza de aceras y veredas debe hacerse sin levantar una dañina polvareda.

El evento volcánico nos recuerda que debemos estar preparados, contar con fondos de ahorro contingente para asistir a la gente y a la producción de modo permanente.

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