Un mes tiene la Asamblea Nacional para estudiar, aprobar, modificar o negar un proyecto que el Ejecutivo considera urgente.
El documento enviado se refiere a la Ley Orgánica de Remisión de Intereses, Multas y Recargos Tributarios.
El proyecto es uno de los acuerdos -de un total de 37- que comprometió el presidente Rafael Correa en el encuentro con varios empresarios en Carondelet.
Se menciona la posibilidad de recaudar USD 500 millones, que le vienen bien a las cuentas fiscales cuando los ahogos derivados de la caída en picada de los precios del petróleo han obligado al Gobierno a tomar medidas en varios ámbitos: recorte presupuestario, salvaguardias, créditos externos, desconocimiento de la deuda al IESS, entre otros.
Las autoridades del Servicio de Rentas Internas aseveran que durante siete años se encuentran establecidos procesos para el cobro de tributos y hay diferendos con varios contribuyentes.
Si en 60 días las personas naturales y jurídicas pagan los tributos se les perdonará intereses, multas y recargos. El proyecto, empero, no elude las acciones judiciales a las que hubiera lugar.
Hay 190 000 contribuyentes morosos y la sumatoria de esos valores adeudados asciende a más de USD 6 000 millones. Algo más de la mitad de este monto son multas, intereses y recargos.
Existe expectativa sobre el financiamiento que se requiere para asumir estas deudas, justamente cuando se inicia una etapa de estrecheces para los diferentes agentes económicos.