Se atribuye al presidente Jaime Roldós el mayor impulso a los derechos humanos. Ecuador salía de un ciclo dictatorial y en América Latina, especialmente en el Cono Sur, aún dominaban terribles dictaduras que practicaban torturas y desapariciones por razones ideológicas. A la oposición no se le permitía ni siquiera protestar.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte-IDH) es una institución judicial autónoma, que ejerce sus funciones desde Costa Rica. Se pudiera decir que es la instancia a la que pueden acudir las personas afectadas por procesos injustos por parte de los Estados.
En Ecuador tenemos varios casos que han derivado en la intervención de esta institución: la detención, tortura y asesinato de la profesora Consuelo Benavides, ocurrido en 1985, y la desaparición de los hermanos Restrepo. Este episodio no llegó a sentencia de la Corte-IDH porque el Estado firmó un acuerdo compensatorio extrajudicial con la familia una vez que la CIDH determinara la responsabilidad del Estado.
Según una investigación de este Diario, el Estado ecuatoriano ha sido condenado en 13 ocasiones por la Corte-IDH desde 1998. Los ciudadanos pueden presentar demandas por violaciones a cualquiera de los derechos humanos consagrados en la Convención Americana. Entre esas demandas constan la libertad de expresión, la integridad personal, la igualdad ante la Ley, etc. El Estado tiene tareas que cumplir, no solo en materia de Derechos Humanos, debe velar por el respeto de todas las libertades individuales.