Amparados en la inimputabilidad de los menores, las mafias los utilizan para vender droga al menudeo.
Las cifras oficiales son contundentes. Los grupos de inteligencia han detectado y aislado a 108 menores de edad con drogas en su poder, en el primer semestre del año.
Los últimos casos conocidos fueron los que se relatan en el reportaje dominical de diario EL COMERCIO titulado: ‘ Mafias captan a más niños para la venta de droga en las calles’.
El Código de la Niñez y Adolescencia considera inimputables a los menores de edad. Hay padres que exponen a los menores a estas actividades. Para ellos las penas van de seis a 35 años de cárcel.
Una persona se halla detenida e investigada por ser responsable de este tipo de inducción a menores en varios barrios céntricos de Quito, como San Roque, La Libertad, Cumandá, 24 de Mayo, Mariscal Sucre, La Colmena y El Panecillo.
Estos datos alarman, tanto como la política de operativos implantada, o mejor dicho, reactivada, en días pasados para hacer requisas en los colegios. Revisiones de mochilas y de bolsillos, uso de cámaras y una serie de medidas dentro de los planteles son una muestra de la decisión por combatir el uso de estupefacientes, pero los métodos pueden agredir la libertad y la intimidad.
Puede resultar toda una contradicción en un país donde se ha despenalizado la tenencia de dosis bajas de droga, pero donde se ha comprobado, como en la nota referida, que el tráfico al menudeo o microtráfico abunda, y se emplea a menores de edad que han sido detectados ya con sustancias que causan evidentes daños a la salud de las personas.