Ralph Murphine destacado consultor polÃtico estadounidense. Ilustrado, sencillo y brillante, asesoró a 23 candidatos presidenciales en 17 paÃses de América Latina. En nuestro paÃs diseñó la estrategia de Jamil Mahuad y luego de Rafael Correa. En una conversación a mediados de 2020 (pocos meses de su fallecimiento), consideraba improbable que Guillermo Lasso, por su condición de banquero, gane las elecciones de 2021, puesto que el 75% de los electores, decÃa, rechazaba a los dueños de los bancos. ¿Qué sucedió? Lasso, del 19,74% frente al 32,72% de Arauz, en la primera vuelta, remontó los 13 puntos de desventaja y creció un 32,62%.  Triunfo con el voto anticorreista.
Correa en la elección presidencial de 2009 y 2013 triunfó en primera vuelta con porcentajes de 51,99% y 57,17%, respectivamente.  Eran tiempos de bonanza económica, precios altos del petróleo y materias primas, reservas y fondos. Dispendio y un gasto público inmoderado con abundante corrupción. Además, el Estado de propaganda y la hegemonÃa autoritaria. Para la elección presidencial de 2017, Lenin Moreno alcanzó el 39,36% en la primera vuelta. El caudal electoral aminoró. Ese deterioro en la adhesión electoral se evidenció también en 2023. La señora González alcanzó una ventaja de 10 puntos en la primera vuelta sobre Daniel Noboa y este terminó venciendo.
En las elecciones del domingo 9 de febrero, el correismo, que pasa por su peor momento, según todos los sondeos de medición de las preferencias, quedará segundo en la primera vuelta. ¿Por qué? La cifra de la candidata de Correa está adherida a un techo denso y duro. Una cubierta de acero fundido. Es el rechazó al populismo autoritario y corrosivo para la democracia. La repelencia que genera el caudillo que aplaude a las dictaduras de Maduro, Ortega o Diaz-Canel.  Es la memoria del infierno que vivimos durante una década de arbitrariedad, odio, persecución y robo.
Si la ventaja de Daniel Noboa sobre la señora González es de varios puntos, según los sondeos, es posible que triunfe en la primera vuelta, si el elector decide utilizar de manera útil su voto y ahorrarnos una infructuosa segunda vuelta. La tercera derrota del correÃsmo le hace bien al paÃs. El populismo autoritario embarrado de corrupción, pegado al crimen organizado y las mafias. De regresar al poder, nos conducirÃa a la ruina total.  Su sello de identidad es la opacidad, corrupción y su afecto a las mafias que esparcen la crueldad y la violencia.        Â