Debate económico 2017

No es difícil identificar cuáles son los temas de debate más relevantes en materia económica. El reto es identificar las mejores propuestas para solucionar problemas estructurales como el desempleo, la pobreza y la falta de competitividad. Para dar respuesta a esos problemas se necesita empezar por definir un modelo económico en el cual estén claros los papeles que deben cumplir el Estado y el sector privado.

La última década es un buen ejemplo de lo que puede hacer el Estado cuando tiene muchos recursos: carreteras, puentes, edificios para más burocracia, escuelas, aeropuertos, refinerías, hidroeléctricas, etc. Y también es una buena muestra de lo que puede pasar en la economía cuando ese Estado debe manejarse con menos recursos: retrasos en el pago a proveedores, hidroeléctricas paralizadas, más impuestos, endeudamiento agresivo y caro, desempleo, menos carreteras, menos puentes.

Un modelo económico es una guía para saber si el motor de la economía es el Estado, la empresa privada o ambos. Durante la última década, el motor del crecimiento económico fue el Estado, gracias a una histórica bonanza petrolera, pero ese escenario no se repetirá en el corto y mediano plazos. Por eso los ocho candidatos a la Presidencia de la República han señalado, en mayor o menor medida, que de aquí en adelante el sector privado será el motor de la economía. La diferencia los distintos candidatos está en el plan de gobierno que presenten a la ciudadanía, pues esa mayor participación de la empresa privada deberá reflejarse una serie de medidas articuladas para resolver los problemas estructurales del país.

En materia de competitividad, por ejemplo, ya se sabe que el país es deficiente en cuanto a innovación, que las regulaciones laborales son muy rígidas, que las reformas tributarias son un enredo para las empresas y que las instituciones son débiles. Los planes de Gobierno deben tener propuestas que permitan creer que se cumplirán.

Suplementos digitales