Hace una semana contamos la historieta de un Rockefeller -Nelson- quien visitó Quito allá por 1943, cuando pocos gringos llegaban a la capital de las nubes ( y del Ecuador) en calidad de turistas. El vino desde Washington enviado por el presidente Franklin Delano Roosevelt con el fin de invitar al presidente ecuatoriano Carlos Alberto Arroyo del Río para que le visite en la Casa Blanca.
Estados Unidos, junto al Reino Unido, estaba en guerra contra el Eje (Alemania, Japón, Italia) y buscaba el mayor número de países aliados en el mundo. Bien que no se olvidó del Ecuador.
La presencia en Quito de un Rockefeller -es decir de un millonario-fue gran noticia y más cuando se hizo amigo y compró seis cuadros al joven pintor indigenista quiteño Oswaldo Guayasamín, a quien, además, invitó a visitar Nueva York. Lo cual si sucedió más pronto que tarde.
Con la circunstancia de que el millonario Rockefeller era aficionado a las artes y algunos años antes tuvo una relación y un problema con el famoso muralista mexicano Diego Rivera. Aun a sabiendas de que Rivera era comunista de fama le invitó a preparar un gran mural que adornaría el sensacional Rockefeller Center de Nueva York, por esa época en plena construcción. Todo marchaba aceptablemente bien cuando surgió el problema. Rivera dio la sorpresa de incluir en su gran obra un rostro del famoso camarada soviético Lenin. Surgió una protesta gringa y Rockefeller pidió al artista que en ese sitio del mural ubique, por favor, el rostro del personaje estadounidense Abraham Lincoln. Rivera se negó y el famoso mural se frenó y fue finalmente destruído y reemplazado por otro, muy diferente.
De paso cabe anotar que Nelson Rockefeller fue por algún tiempo director del Museo de Arte Metropolitano de Nueva York y ayudó durante siete meses al prometedor artista ecuatoriano Oswaldo Guayasamín, quien dio un yucazo a EE.UU. y se marchó a otros lares, convirtiéndose en amigazo de Fidel Castro y muchas figuras rojas destacadas.
Mientras tanto, Nelson Rockefeller subía, con sus millones, en el partido republicano, como buen nieto del fundador de esa tribu, John Rockefeller 1. Fue gobernador de Nueva York de 1959 a 1973 y buscó la presidencia de los Estados Unidos en 1964 y 1968, sin suerte. Ningún Rockefeller llegó a la Casa Blanca, ahora ocupada por el polémico millonario mister Trump.
Lo que si alcanzó el Nelson Rockefeller de nuestra historieta de hoy es la vicepresidencia de EE.UU., de 1974 a 1977, con Gerald Ford como presidente.
El final de Nelson Rockefeller es algo histórico o más bien dicho histérico. Lo cierto es que, habiendo nacido el 8 de julio de 1908 falleció el 28 de enero de 1979, a los 70 años. Inicialmemte se difundió que había muerto por un ataque cardiaco y punto. Pero luego se descubrió que se fue al otro mundo mientras hacía el amor con su secretaria Meaga Marsh.