Una red alternativa en Brasil promueve la participación femenina en cargos de elección con apoyo mediático. Esta campaña, como otras en América Latina, intenta revertir un panorama político donde pese a ser mayoría, en promedio las mujeres ocupan apenas 29,8 por ciento de cargos legislativos.
Es la primera reunión en Río de Janeiro, y a la sede de Mídia Ninja comienzan a llegar periodistas, asesoras de prensa, activistas de redes sociales, diseñadoras, fotógrafas, videorealizadoras, todas interesadas en participar de la Campaña Mujer convocada por esa red alternativa de comunicación.
“La idea general de la campaña es impulsar a las mujeres para que tengan reales posibilidades de elección”, explicó a IPS la coordinadora de Mídia Ninja, Driáde Aguiar.
Falta poco para los comicios de Brasil, donde el 7 de octubre se elegirá al presidente, gobernadores, diputados y senadores y no hay tiempo para muchos debates.
Aguiar y las comunicadoras se organizan sin muchos preámbulos. Ante una lista de las más de 100 candidatas registradas apenas lanzada la convocatoria, cotejan su disponibilidad de tiempo, distribuyen tareas, equipos, y establecen las directrices de las campañas.
Midia Ninja las convoca para que cada una en su saber y en su disponibilidad de tiempo, confeccione para las candidatas piezas de campaña como videos, afiches, comunicados de prensa, materiales para redes, y las entrene para comunicar sus ideas. El objetivo es “demostrar que la política también es cosa de mujer”, insisten en la reunión.
Aunque la Ley Electoral brasileña establece que cada coalición partidista debe incluir un mínimo de 30 por ciento y un máximo de 70 por ciento de candidaturas de cada sexo, la regla no se aplica en profundidad.
“Los partidos ponen mujeres para cumplir la cuota de 30 por ciento pero no les dan las mismas garantías que a un hombre. No les aportan el equipo de comunicación, de planificación estratégica, no hay fondos para ellas, no les dan el mismo tiempo de televisión, o sea no les dan incentivos para que se elijan”, analizó Aguiar. “En Brasil tenemos un cuadro horrible que no ha cambiado mucho pese a que logramos el derecho al voto en 1932. Aunque somos 52 por ciento de la población, en el (bicameral) Congreso legislativo tenemos apenas 10 por ciento de mujeres y apenas tres negras, en un país con 51 por ciento de población negra”, detalló.
Además, hay 13 mujeres de 81 miembros del Senado y siete concejales hombres por cada mujer en las cámaras municipales.
Dilma Rousseff, la primera presidenta mujer de Brasil (2011-2016), fue destituida por un controversial juicio político en el Poder Legislativo, que los defensores de la exmandataria aducen que incluyó sesgos de discriminación de género.