Tras largos años de negociaciones lideradas por Estados Unidos, los delegados de alto nivel de los países más poderosos llegaron a un acuerdo con Irán. La energía nuclear tendrá solo fines pacíficos.
La ambición nuclear iraní nació el siglo pasado, en tiempos del Sha, aliado de Occidente, que empezó a construir plantas nucleares.
La revolución teocrática que derrocó al Sha siguió, empero, con esos planes y la recolección de uranio enriquecido que posibilita la fisión. Irán, desde Occidente, se vio como una amenaza y eso tensó las relaciones hasta forzar un bloqueo al comercio exterior iraní con varios países aliados de Estados Unidos y otras potencias.
El Grupo 5 + 1 está compuesto por Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania, Rusia y China. Durante años de largas negociaciones, el acuerdo que parecía imposible llegó y con él el riesgo nuclear militar de Irán podría ser controlado con una vigilancia exhaustiva.
El reelecto primer ministro israelí Benjamín Netanyahu fue el primero en reaccionar negativamente. Se debiera incluir, a su parecer, el compromiso de Irán de respetar al Estado israelita.
El anterior presidente persa Mahmud Ahmedinejad se pronunció por desaparecer del mapa a Israel. Irán tiene gran influencia geopolítica en una zona convulsa con muchos conflictos bélicos instalados.
El momento siguiente será la caída de los precios del petróleo si Irán y sus inmensas reservas salen al mercado. Esa es otra historia complicada para el Ecuador.