La semana pasada quedaron aprobadas las traducciones, a 24 idiomas, del texto de acceso del Ecuador al acuerdo con la U.E., con lo que el Ministro Cassinelli, que ha viajado todas las semanas (o casi) a Europa para acelerar el proceso, cumplió con el objetivo que se puso.
Europa se apresta a tomar sus largas vacaciones veraniegas, y si no se cumplía con esa meta la semana anterior, el asunto hubiera quedado pospuesto para setiembre.
Hay otros plazos que cumplir, asimismo perentorios, para conseguir lo que al momento parece improbable: que en diciembre 15, en su última sesión antes de entrar en sus vacaciones de navideñas, el parlamento europeo ratifique el acceso del Ecuador al acuerdo.
Si se inicia 2017 sin acuerdo, también se iniciará sin preferencias arancelarias. Caerían las exportaciones no petroleras y con ello más recesión y deterioro de la balanza comercial. Habrá exportadores en graves dificultades. Para firmar contratos con sus clientes europeos para 2017, algunos habrán tenido que absorber cualquier aumento en derechos arancelarios. Es un buen momento para que las autoridades hagan un gesto conciliatorio con la comunidad internacional: comenzar a desmantelar la salvaguardia. Se la renovó intempestivamente por un año, cuando el precio del petróleo cayó por debajo de lo previsto. Pero el precio ya se recuperó, aunque modestamente. Con la reducción de la salvaguardia, se aplacarían los ánimos en la OMC, y los europeos podrían aspirar a vendernos más. Es probable que lime ciertas asperezas en el camino de la ratificación.
La economía necesita las importaciones. Según cuentas nacionales, en el primer trimestre la formación de capital cayó 9% interanual. Un colapso. A esto contribuyó la salvaguardia a la importación de bienes de capital. Las importaciones de bienes de capital para la industria caen 30% interanual en enero-mayo. Es deseable que se importen equipos para que haya más producción y empleo.En cuanto a competitividad: ¿Cómo pueden competir las actividades productivas cuando pagan salvaguardia sobre sus importaciones de insumos? Las importaciones de insumos caen 28%.
El consumo de hogares cayó 3.9% en el primer trimestre; eliminar la salvaguardia a insumos no significa una explosión de importaciones, sino una reducción menos pronunciada. Un leve deterioro de la balanza comercial a cambio que la economía no se contraiga tanto.
Claro, caerían los ingresos que percibe el fisco por las importaciones. Pero sería un despropósito gravar a las importaciones necesarias para reactivar a una producción alicaída, con el objetivo de levantar ingresos fiscales.
Hay que cambiar prioridades: lo principal es qué hacer para que la economía salga de su profunda crisis y no de dónde sacar dinero para mantener el gasto fiscal.