Es rica, amplia y de gran calidad la tradición de los médicos humanistas. Quizás sobre todo comparativamente esa tradición en español y, por supuesto sin que esté exclusivamente reservada a los galenos, pero parecería que sus estudios y su práctica les inspiran particularmente a éstos.
Por ejemplo son característicos los casos del premio Nobel Santiago Ramón y Cajal; ni qué decir del culminante Gregorio Marañón – con su “Conde-Duque de Olivares” y la pasión por el Poder, o el estudio de “Don Juan” y el donjuanismo – y algo más recientemente, Pedro Laín Entralgo y la generación del 98.
También por nuestros lares, los casos ilustrativos no han sido escasos. Y a propósito de cumplir el personaje noventa años, el siempre entusiasta gremialista Dr. José Miguel Alvear, ha tenido la acertada idea de producir un libro, como compilador, en “exclusivo homenaje a uno de los nuestros, el doctor Plutarco Naranjo Vargas… atendiendo a los aspectos médicos… que en su conjunto den la visión más completa posible sobre la inmensa producción médica de Plutarco Naranjo en investigación, docencia, servicio público y liderazgo multifacético”.
Con esos propósitos el libro está dividido en varias partes. La primera incluye los artículos de autores en torno de matices tan variados como el desempeñó en el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social IESS , la Casa de la Cultura Ecuatoriana Benjamín Carrión, el Ministerio de Salud durante el período 88-92, el periodismo científico, las investigaciones en los laboratorios LIFE, la alergología, la cátedra universitaria, etc.
Para la segunda parte se reproducen documentos como el discurso de aceptación de la presidencia de la Asamblea Mundial de la Salud y el discurso de aceptación del profesorado emérito de la Universidad Andina Simón Bolívar.
Luego vienen las disertaciones en algunos Congresos médicos; los prólogos para los estudios sobre Eugenio Espejo y sobre Juan Montalvo, siendo de notar que a este último personaje, Naranjo ha dedicado un verdadero culto, y los artículos periodísticos respecto otra vez, de cuestiones tan amplias como la alimentación, las plantas aborígenes, medicamentos y nuevas enfermedades, medicinas: grandes utilidades, población y cáncer, focos ahorradores: sus riesgos, la edad: graves problemas, plantas y alimentos genéticamente modificados, cambios climáticos y nutrición, la revolución decapitada, discapacidades, derechos materno-fetales, las células madres, y así por este caleidoscópico panorama de problemas antiguos y modernos.
Como consecuencia, está más que justificado el homenaje que se ofrecerá al doctor Plutarco Naranjo, figura emblemática del médico humanista, por parte de la Academia Ecuatoriana de Medicina y los Laboratorios Industriales Farmacéuticos.