Antonella Escorza y Jacqueline Egas, de Atuk, brindan atención veterinaria a domicilio a sus pacientes. Foto: Vicente Costales / Narices Frías
Un viaje a la clínica puede, en ocasiones, provocar estrés y ansiedad en los animales. Cuando se trata de consultas y procedimientos simples , existe la opción de pedir un veterinario a domicilio.
Este servicio busca brindar una mayor comodidad a las mascotas y sus dueños. Atuk nació hace tres meses con este objetivo. Antonella Escorza y Jacqueline Egas se encargan de dar un tratamiento personalizado a cada paciente. Ellas trabajaban en una clínica veterinaria y vieron la necesidad de un servicio médico más cómodo para los usuarios.
Cada semana atienden un promedio de 10 pacientes en sus domicilios. “Vimos que muchas personas tenían problemas para llevar a sus perros o gatos a los consultorios y que para los animales también representaba un estrés”, cuenta Escorza. El servicio tiene un costo entre USD 20 y 25.
La atención ambulatoria a domicilio tiene sus ventajas para los dueños y para las mascotas, agrega Álex Medina, médico veterinario que brinda este servicio desde hace siete años.
“Los clientes pueden tener dificultad en llevar a los perritos a las clínicas. No tienen tiempo, los taxis no siempre los llevan y no todos tienen vehículo propio”, dice. Esto se vuelve aún más difícil cuando el perro es grande y no entra en un transportín.
Otra ventaja es que para procedimientos más complejos, los mismos médicos pueden llevar a los perros o gatos a los hospitales y luego regresarlos a su casa, agrega Egas.
El diagnóstico también se realiza analizando el espacio donde vive la mascota. “Se hace más fácil ver el ambiente en el que vive el paciente para determinar alguna
fortaleza o deficiencia. Podemos ver cosas que muchos dueños pasan por alto y esto nos ayuda a dar un diagnóstico más adecuado”. Por ejemplo si presenta una reacción alérgica, el médico puede identificar si se debe a algún producto de limpieza o alguna planta que esté en el espacio donde vive el perro o el gato.
En su hogar los animales suelen estar más tranquilos y toleran mejor los procedimientos. Sin embargo aclaran que no todo se puede realizar en un domicilio. “Una esterilización, una curación que requiera anestesia se debe hacer en una clínica donde cuentas con los implementos adecuados para una mejor atención”, apunta Egas.
Las consultas que se realizan son menos complejas. Vacunaciones, desparasitaciones, tratamientos de alergias o infecciones por virus o bacterias pueden realizarse en casa. Además se hacen cortes de uñas y limpiezas de heridas.
Para acceder a este servicio es recomendable hacer las citas con uno o dos días de anticipación. Al momento de comunicarse con el veterinario es necesario informar sobre la mascota que se va a tratar, si se requieren vacunas, desparasitaciones o si necesita una curación especial con el fin de que el médico tratante lleve todo el material e implementos necesarios para la consulta.