Charlie Calvache y Andrea González realizan retratos de mascotas en óleo y acuarela. Fotos: Julio Estrella y Roberto Peñafiel / Narices Frías.
Además de las características físicas, los artistas intentan plasmar en los retratos algunos rasgos importantes de la personalidad de sus protagonistas. Ese es el trabajo de dos pintores que dedican parte de su tiempo a crear imágenes de animales de compañía para sus dueños. Andrea González y Charlie Calvache empezaron a pintar a raíz de sus propias experiencias.
Cuando a Simón le detectaron cáncer, en noviembre del 2015, Andrea González supo que quería tener una imagen de él para mirarla siempre. Ella pinta desde hace muchos años y encontró en la acuarela la técnica adecuada para retratar al compañero de su vida. Ese primer retrato tenía un estilo muy realista y mostraba a su schnauzer tal como en una fotografía que le había tomado.
Aunque Simón falleció a principios de este año (2016), Andrea todavía tiene la pintura que hizo. La guarda en su casa, donde la puede ver a diario. La artista también es psicóloga y cree firmemente en el vínculo que se genera entre un animal y su dueño. “Las mascotas nos dan muchas alegrías y se vuelven parte de tu familia”, indica.
Charlie Calvache cuenta con mayor trayectoria. Es cantante, actor y artista plástico. Aunque la pintura es un área que ha explorado desde hace muchos años, no empezó a pintar retratos de mascotas sino hasta el 2013.
Rafa, el bulldog inglés de su esposa, fue diagnosticado con epilepsia y los médicos no le dieron mucho tiempo de vida. “Me nació la idea de hacerle un retrato, incluso pensando también en que tenga un recuerdo del perrito”, dice el artista.
Los retratos de Charlie son realistas. Para su trabajo prefiere la técnica del óleo– aunque también pinta en acrílico y hace dibujos en carboncillo- porque le permite agregar texturas y colores a los retratos.
“Lo complicado no es que sea un bulldog, sino que sea Rafa”, comenta Charlie. En sus pinturas es sumamente importante que las personas puedan reconocer en la imagen a sus mascotas, más allá de los detalles físicos. Aunque la mayoría de personas le piden retratos realistas, también realiza trabajos más abstractos.
Andrea modificó el estilo de sus pinturas, aunque se quedó con la acuarela. Sus trabajos ahora son menos realistas, con un aire similar a los retratos humanos de la italiana Silvia Pelissero.
Pone especial cuidado en el tratamiento del color y la cantidad de agua para que las pinceladas sean ligeras y hacen guiños a la soltura de la abstracción. Usa colores vivos: amarillo, verde, rojo, azul y morado para dar brillo y profundidad.
Las historias que van detrás de cada cuadro también marcan el trabajo de los artistas. En el caso de Andrea fue Charlie. Él era un pitbull que falleció por cáncer. Una mujer le encargó ese trabajo para regalárselo a su esposo que estaba triste. “Te das cuenta de todo lo que significa un perro en la vida de una persona”, comenta Andrea.
Para los retratos se pide a los dueños que envíen fotos de sus mascotas en buena resolución. Aunque no siempre logran conocer al protagonista del cuadro, conversan con las personas para que puedan plasmar los detalles de su personalidad.
Dependiendo del retrato, puede tardarse entre 40 minutos y cuatro horas. “Los perros que tienen pelo largo me cuestan más trabajo”, reconoce Andrea. Ella publica sus trabajos en su cuenta de Instagram Los retratos tienen un costo de USD 50 para el tamaño estándar. Para más información puedes contactarte con Andrea al correo colorsbyandreglow@gmail.com.
En el caso de las pinturas al óleo, el tiempo de entrega varía entre dos y tres semanas dependiendo de la técnica y el tamaño. Los costos van desde los USD 80 hasta los USD 200. Puedes comunicarte con Charlie a su correo electrónico charliecalvachediaz@gmail.com.