La Agencia Metropolitana de Control (AMC), en colaboración con la Unidad de Bienestar Animal (UBA), impuso una multa de 4 600 dólares a Segundo G.. Fue sancionado por los daños físicos que su perro causó a un niño de 10 años en Tumbaco.
El incidente ocurrió el pasado 19 de enero de 2024, cuando el menor fue atacado por dos perros de la propiedad de Segundo G. mientras caminaba por el pasaje Los Giljeros. El incidente fue cerca de las 11:00.
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Multa al dueño del perro que mordió a un niño en Tumbaco
Los perros, al salir de la vivienda de Segundo G., se abalanzaron sobre el niño, derribándolo y mordiendo su cara, espalda, piernas y axilas.
Los vecinos del barrio Ocaña, al escuchar los gritos del menor y los gruñidos de los animales, intervinieron para alejar a los perros y proteger al infante.
La madre del menor trasladó de inmediato a su hijo a un centro médico, donde recibió atención para las heridas, que incluyeron varias suturas en la mejilla y la rodilla derecha.
De acuerdo con la normativa municipal, el propietario de los animales debe asumir la responsabilidad por los daños que estos causen a terceros, ya sea a personas, bienes ajenos o a otros animales.
En este caso, la infracción corresponde al apartado Muy Grave. Por eso, Segundo G. enfrenta una multa de 4 6 00 dólares, equivalente a 10 salarios básicos, según el artículo 3711 del Código Municipal.
El perro que mordió a un niño en Tumbaco necesita un examen etológico
Expertos de la Unidad de Bienestar Animal le sugirieron al tutor del perro realizarle un examen etológico. Se trata de una herramienta fundamental para comprender el comportamiento y el bienestar del animal en su entorno.
Este tipo de evaluación, realizada por especialistas en conducta canina, permite identificar patrones de comportamiento, posibles trastornos o fuentes de estrés que puedan estar afectando al perro.
Al observar y analizar cómo el animal interactúa con su entorno, otros perros y las personas, se pueden diseñar estrategias de manejo y entrenamiento más efectivas y personalizadas.