Molly tiene la misión de reunir a mascotas perdidas con sus dueños. Foto: The Pet Detectives
Molly es una perra detective. Pasa sus días olfateando por las calles de Inglaterra para encontrar a quienes se han perdido o han sido robados. Pero no, no busca niños y tampoco personas adultas. Molly busca gatos.
Trabaja para una organización que se encarga de buscar animales extraviados. Junto a su dueño, Colin Butcher, patrulla las calles en busca de un felino desorientado. Cuando lo encuentra se acuesta sobre su estómago para no asustarlo.
Molly fue abandonada por su familia y estuvo en varios hogares temporales. Pero en 2016 esta cocker spaniel finalmente fue adoptada. Ella y su dueño fueron compatibles desde el principio, pues la perra se adaptó a trabajo de Colin en poco tiempo.
Butcher nunca tuvo mucha suerte rescatando gatos. Cuando se pierden, suelen quedar atrapados en lugares de difícil salida y muchos de ellos mueren atropellados o en peleas callejeras.
La perra está entrenada para reconocer olores y en el tiempo que llevan juntos ya han rescatado 11 gatos. Su primer trabajo exitoso fue en febrero del 2015. Halló a un gato que estaba atrapado en el techo de un granero y sus dueños no lo podían creer.