Los perros aprenden a hacer sus necesidades fuera de casa entre los primeros cuatro meses de vida. Foto Flickr Jorge Fernández Flores.
Todas las personas quisieran que sus peludos estén entrenados para hacer sus necesidades en un solo lugar. Pero la mayoría de veces esto no sucede y hay problemas. Los cachorros orinan dentro de casa y no en el jardín, entonces los dueños se preguntan qué hacer para educarlos. En esta nota te damos una guía sobre cómo entrenarlo.
Primero debes saber algunas cosas cobre los cachorros. A ellos no les gusta ensuciar su guarida. Los lobos salen de su madriguera para hacer sus necesidades y esta conducta también la adoptan los canes, indica el blog especializado del ‘Encantador de Perros’.
Los perros funcionan como un reloj y esta es una estrategia que se debe utilizar. Entre 10 y 30 minutos después de comer, los cachorros necesitarán salir para hacer sus necesidades. Con el paso del tiempo, los dueños aprenden a conocer el tiempo adecuado y saben cuándo es momento de salir a pasear.
PetMD, un portal de cuidados para mascotas, explica que hay una regla que se aplica generalmente: “un cachorro puede aguantarse una hora por cada mes de vida”. Es decir, un can de dos meses puede controlar su vejiga por dos horas. La recomendación es sacarlo, al menos una vez cada hora, para evitar accidentes.
Hay conductas y comportamientos que pueden alertar a los dueños sobre la necesidad de su mascota de salir. “Cuando se despiertan de una siesta, antes de ir a dormir por la noche, al levantarse por la mañana, luego de tomar agua o comer son momentos para salir indiscutiblemente”, dice el blog Cesar’s Way. Si notas que tu pequeño empieza a caminar en círculos y deja de jugar para ponerse a oler a su alrededor, es otra señal de que debes sacarlo.
Los expertos coinciden en que la mejor forma de entrenar a un perro para que haga sus necesidades afuera es tener una rutina consistente. El cachorro debe comer siempre a la misma hora y sus paseos deben ser regulares (una vez que tenga todas sus vacunas).
Existen pañales que se colocan en el piso. Estos contienen una sustancia que dispara el deseo de orinar en los peludos. Con el tiempo, se acostumbran a hacerlo en este lugar. Esto funciona en departamentos; sin embargo, cuando se trata de enseñar al can a ensuciarse afuera, es mejor no colocar estos pañales dentro de casa porque el animal pensará que es un lugar adecuado para ensuciarse.
No vamos a mentirte, seguramente habrán accidentes. Entrenar a un perro requiere de tiempo y paciencia. Cuando se ensucie en un lugar no adecuado, no seas agresivo con él. Simplemente llévalo al lugar correcto y limpia el piso sucio. Los golpes, inclusive con periódico, pueden convertirse en una experiencia negativa y bloquear el proceso de aprendizaje de la mascota.