Amaranto, de dos años de edad, fue atropellado en el sur de Quito. Foto: Camino a Casa
La única oportunidad de vivir que tiene Amaranto es encontrar una familia que lo adopte. Este perrito fue atropellado en agosto del 2018 en el sur de Quito. El pequeño fue rescatado y operado. Parecía su recuperación tendría éxito pero todo cambió.
Un mes después de su cirugía, Amaranto camina y salta como un cachorro. Pero el atropellamiento provocó una afectación permanente en los nervios de la zona de la cadera. Esto implica que el pequeño no puede controlar sus esfínteres.
“Hay perritos en perfecto estado de salud que van meses en hospedaje o en hogares temporales y no encuentran familia aún. Imaginen lo difícil que será que alguien adopte a Amaranto en ese estado”, escribió la Fundación Camino a Casa en su blog.
El cachorro de dos años de edad necesita cuidados especiales, debe usar pañales y se le deben realizar limpiezas diarias por lo que no es una opción enviarlo a un hospedaje. Sus rescatistas han llegado a la conclusión de que su única oportunidad es encontrar una familia que lo adopte, si no la encuentra deberá ser sacrificado para evitarle más sufrimiento.
Si estás interesado en adoptarlo puedes comunicarte con la Fundación Camino a Casa en su página de Facebook. También lo puedes visitar en la Clínica Veterinaria Brasil en la N45-213 y Zamora, en el norte de Quito.