Shippify tiene operaciones en Ecuador, Chile, Brasil, México y a finales de 2017 planea abrirse espacios en Argentina, Colombia y Perú.

Shippify tiene operaciones en Ecuador, Chile, Brasil, México y a finales de 2017 planea abrirse espacios en Argentina, Colombia y Perú.

Shippify, un ‘start-up’ ecuatoriano que revoluciona el servicio de entrega

Shippify tiene operaciones en Ecuador, Chile, Brasil, México y a finales de 2017 planea abrirse espacios en Argentina, Colombia y Perú. Foto: Cortesía Shippify

¿Has intentado comprar un artículo en línea? Probablemente te hayas encontrado con esta realidad: Claro, es muy cómodo el hecho de no tener que salir de casa para hacer compras, pero ¿y la entrega? ¿Cuánto demoran los servicios de courier en entregar finalmente el producto? Como una posible alternativa para esta problemática surgió Shippify, en 2016, y ahora planea expandirse a siete países de América Latina.

Durante la administración de Sebastián Piñera (2010-2014), los ecuatorianos Luis Loaiza y Miguel Torres tuvieron la oportunidad de participar en el programa ‘Start-Up Chile’, una incubadora de emprendimientos que importa ideas para ser desarrolladas en Santiago. Así crearon Escapes With You, una compañía que ofrecía experiencias y productos “no tradicionales”.

Incursionando en el mundo del e-commerce, “siempre nos topamos con un problema”, relata Torres. “Si bien las tiendas de comercio electrónico funcionan muy bien en sus plataformas, cada vez que se enviaba un producto, el cliente lo recibía en un lapso de entre 7 a 12 días”.

Según cifras del Instituto Ecuatoriano de Estadísticas y Censos (INEC), en el país se generan anualmente alrededor de USD 540 millones en comercio electrónico. Además, un 17,1% de las empresas ecuatorianas han realizado alguna transacción por Internet, señala la cifra de 2016. En definitiva, el mercado del e-commerce se expande cada vez más en el país y en América Latina, pero existe una falencia en el sistema de entregas en el cual los dos ecuatorianos hallaron una oportunidad de negocios.

De esta manera, Loaiza y Torres se dieron cuenta de “un problema súper grande en la industria de e-commerce”, así que decidieron proponer un servicio que conecte a los emprendedores con sus entregas.

Al momento de iniciar este emprendiemiento “nosotros no teníamos vehículos, ni ningún activo”, comenta Torres. Crear una flota para montar una compañía de logística no solo requiere de una fuerte suma de dinero, sino también de un periodo de varios años hasta que se logre sustentar. Pero aplicando un nuevo modelo de negocios -la economía colaborativa- han logrado una planta de 45 000 colaboradores o ‘shippers’ en varios países de América Latina, en menos de un año y medio.

Shippify tiene operaciones en Ecuador, Chile, Brasil, México y a finales de 2017 planea abrirse espacios en Argentina, Colombia y Perú. Dentro de la red de este servicio se encuentran alrededor de 420 clientes que se dedican al comercio electrónico, entre grandes empresas y pequeños y medianos emprendedores. Con esta ‘app’, las entregas se hacen el mismo día de la compra.

Cualquier persona que cuente con un medio de locomoción, como un vehículo, una moto o inclusive una bicicleta, puede formar parte de Shippify. Pero existen algunos requisitos para formar parte de la empresa.

Se necesita ser mayor de edad, que el vehículo esté matriculado y cuente con todos los permisos ambientales, póliza de seguro, referencias personales y la entrega de un acta de antecedentes penales. Una vez que la persona pasa por este proceso de selección, tiene que asistir a algunas capacitaciones de la empresa y finalmente se convierte en un nuevo ‘shipper’.

Quienes realizan las entregas son personas con perfiles muy diversos. “Tenemos gente desde los 20 años que hacen entregas en bicicletas, de más de 60 que ya están retiradas y otras que lo hacen como servicio complementario; utilizan aplicaciones para transportar pasajeros (como Uber y Cabify) y en las horas de menor flujo hacen entregas con Shippify”, asegura Torres.

Al aplicar un estándar más alto en la industria de logística, comenta Torres, “el principal beneficiario es el consumidor. Estamos cambiando por completo el modelo de logística tradicional a un modelo descentralizado, donde democratizamos esos trabajos para estos emprendedores”.

La aplicación para dispositivos móviles está disponible en Android e iOS. Funciona, al igual que Cabify o Uber, en base a la geolocalización, así que las entregas pueden ser rastreadas en tiempo real por el usuario.