El Galaxy S7 y el S7 Edge son los nuevos teléfonos de Samsung. Foto: Computerworld / IDG

El Galaxy S7 y el S7 Edge son los nuevos teléfonos de Samsung. Foto: Computerworld / IDG

Samsung Galaxy S7 y S7 Edge: análisis a fondo

El Samsung Galaxy S7 y el S7 Edge pueden ser sumergidos hasta 3 metros bajo el agua. Foto: Computerworld / IDG

Los nuevos smartphones de Samsung, el Galaxy S7 y el S7 Edge, son dos teléfonos muy bien ejecutados, dignos buques insignia de uno de los fabricantes de electrónica más grandes del mundo.

Los cambios con respecto a las líneas S6 del año pasado parecerían pocos, pero las correcciones y mejoras están en todos los lugares correctos, y son esas pequeñas mejoras las que hacen de los dos teléfonos mucho mejores, con precios que comienzan en el mercado mundial en USD 650 para el S7 y USD 750 para el S7 Edge, precios que varían dependiendo de la compañía y el país donde se los encuentre.

Samsung, al igual que su némesis, Apple, parece estar en un calendario de dos años, ya que si bien hay un nuevo modelo cada año, las mejoras e incrementos importantes en sus modelos se ven saltando un año. El S7, al igual que las actualizaciones ‘S’ de Apple, se basan en modelos del año anterior, modificando aspectos importantes sin cambiar la forma básica.

Especificaciones y características

El Galaxy S7 y el S7 Edge son los nuevos teléfonos de Samsung. Foto: Computerworld / IDG

La principal mejora, la que dio lugar a muchos rumores, terminó siendo bastante cierta: la línea S7 es casi completamente impermeable. En términos de tecnología, los teléfonos S7 tienen una calificación IP68: impermeable al polvo y protegidos de la inmersión prolongada de hasta 3 metros bajo el agua.

Ninguno de los puntos críticos del teléfono (como el puerto de energía micro USB, el micrófono, el altavoz, los botones de encendido y volumen, o la bandeja para colocar la memoria externa y la tarjeta SIM) permiten el ingreso de líquidos al teléfono. Esta definitivamente es una característica que apreciarán aquellas personas que han sufrido del síndrome de manos resbalosas en el cuarto de baño.

​Y esta es solo una de las tantas características de los nuevos teléfonos Galaxy.

El Samsung Galaxy S7 y el S7 Edge resisten bajo el agua. Foto: Computerworld / IDG

El S7 mide 14,24 x 6,96 x 0,79 cm., con una pantalla de 12,9 cm. Y un peso de 152 gramos; el Edge es de 15,09 x 7,26 x 0,77 cm., y su pantalla mide 13,97 cm., mientras que su peso es de 157 gramos.

La diferencia entre estos dos, además del tamaño, está en la pantalla: la del S7 es plana, mientras que la versión Edge tiene pantalla redondeada a lo largo de ambos bordes largos.

Tanto el S7 y S7 Edge ejecutan Android 6.0.1 (Marshmallow) y también la interfaz de usuario TouchWiz de Samsung. Ambos teléfonos vienen en colores negro y oro; el Edge también tiene una versión en color plata. Los bordes rojos y verdes del año pasado aparentemente han sido retirados.

Pantallas estupendas

Las pantallas del Samsung Galaxy S7 y el S7 Edge son de altísima resolución. Foto: Computerworld / IDG

Las pantallas del S7 y S7 Edge saltan directamente a la vista con claridad absoluta. Ambas pantallas son Súper AMOLED, protegidas por Corning Gorilla Glass 4, con 2 560 x 1 440 píxeles con una resolución de 640 puntos por pulgada (o dpi, por las siglas en inglés de ‘dots per inch’).

La imagen en pantalla es sorprendentemente aguda, y la infraestructura de procesamiento dentro de los teléfonos fácilmente les sigue el paso a estas pantallas.

Los móviles de Samsung siguen la moda actual de pantallas ‘siempre activas’; incluso cuando el teléfono está en modo de suspensión, se muestra la hora o el calendario. Lo que el teléfono muestra en este estado se puede configurar, pero no hay demasiadas opciones aquí.

Samsung asegura que el uso de energía de esta función es mínimo - 0.8 miliamperios (mAh) por hora - y no tiene un impacto significativo en la vida de la batería.

Y al igual que en los modelos anteriores, las pantallas redondeadas del S7 Edge tienen funciones extra. Dependiendo de cómo y en qué parte del borde se deslice los dedos, se puede leer noticias, acceder a contactos importantes o a funciones frecuentemente utilizadas.

El borde (o mejor dicho, el teléfono) tiene un modo ‘No molestar’ que permite mostrar la hora sólo a lo largo uno de sus bordes. Y deslizar hacia arriba y hacia abajo a lo largo de un borde cuando el teléfono está dormido mostrará el número de mensajes y de correos electrónicos que hay en espera, además de mostrar un rastreo de noticias.

Estas son funciones exclusivas del S7 Edge; deslizar los dedos pro el borde de la pantalla del S7 no hará nada especial.

Velocidad y comodidad

Apenas y existe alguna esquina en estos teléfonos. Los lados son redondeados y encajan cómodamente en la mano.

El botón de encendido se encuentra en el borde derecho, en una perfecta posición, y los botones de volumen están a lo largo del borde izquierdo. La bandeja de la tarjeta SIM y la Micro SD está en la parte superior; el altavoz, puerto micro-USB y conector de auriculares se encuentran en la parte inferior.

Los interruptores de encendido y volumen están perfectamente posicionados debajo de los dedos pulgar e índice al momento de tomar el teléfono con la mano. Los diseñadores prestaron mucha atención al equilibrio del teléfono y la forma en que la mayoría de usuarios lo sostienen, y los botones están posicionados de forma diferente a la mayoría de teléfonos.

Samsung ha decidido traer de vuelta la ranura para micro-SD, que fue la gran ausente en el Galaxy S6, lo que quiere decir que la capacidad de almacenamiento del teléfono podrá nuevamente expandirse mediante el uso de tarjetas externas.

El conector de energía es un micro-USB; Samsung no ha optado por los actuales puertos USB-C, y solo el futuro dirá si estos puertos predominarán sobre los ya tradicionales puertos USB.

La batería (3 000 mAh para el S7, 3 600 mAh para el Edge) permanece sellada dentro del teléfono. Esto realmente no es un problema; los teléfonos son compatibles con QuickCharge 2.0 y cargarlos completamente toma un tiempo aproximado de dos horas.

Las pruebas de campo del teléfono muestran que con esta batería se puede conseguir un tiempo de conversación de 4 horas para el S7 y 5 horas para el Edge, y el tiempo de espera es de más de dos días para ambos teléfonos. Ambos soportan también la carga inalámbrica, por lo que se puede adquirir una almohadilla de carga extra para el teléfono y así no será necesario conectarlo para recargarlo.

En cuanto al procesador, Samsung ha decidido utilizar dos tipos en sus teléfonos: el Qualcomm Snapdragon 820 o el Exynos 8890. Ambos son procesadores de cuatro núcleos de primera línea, y en pruebas iniciales los teléfonos no han mostrado un comportamiento diferente por el hecho de tener uno u otro procesador.

Ambos teléfonos tienen un botón físico de inicio, que también funciona como sensor de huella digital. Este está ubicado en la parte central del borde inferior de los teléfonos, y tiene una ligera elevación.

Los botones de Selección y Regreso están ubicados a los lados del botón de inicio, y en este caso son botones táctiles, no físicos, tal como han funcionado en diferentes modelos de teléfonos Android. ¿Cómo encontrarlos? Ambos se iluminan al momento de sentir el toque de la yema de los dedos.

Cámara de 12 megapixeles

La cámara trasera del Samsung Galaxy S7 y el S7 Edge es de 12 megapixeles. Foto: Computerworld / IDG

La cámara principal en la parte posterior de los teléfonos - ubicada en el centro lateralmente y cerca de tres centímetros desde el borde superior – sobresale del resto del cuerpo por 0.5 milímetros; es mucho menos prominente que en los modelos anteriores.

Es una cámara de 12 Megapixeles (MP) que se ha construido pensando en situaciones con poca luz. La cámara tiene una abertura focal de f/ 1.7 y un menor número de píxeles en un sensor del mismo tamaño que el S6, lo que permite que los píxeles restantes sean más grandes. Eso es clave para la calidad de la foto.

Un flash LED y un sensor de frecuencia cardíaca / SpO2 han sido colocados a la derecha de la lente de la cámara. La cámara es una de las primeras beneficiadas de la capacidad de procesamiento de los nuevos Galaxy. El cálculo del enfoque y la exposición es muy rápido.

Hay opciones para tomar fotos panorámicas, tomar videos en cámara lenta y cámara rápida, así como un modo ‘comida’ para los fanáticos de fotografiar su comida y publicarla en InstaGram antes de comérsela.

Y, para los fanáticos de mantener el control sobre la cámara, hay un modo ‘Pro’ que le da un control completo al usuario sobre la exposición y el enfoque. La cámara incluso le permite guardar en formato RAW (es decir, sin edición ni mediación de ningún software, tal y como la ha captado el sensor de la cámara).

Por último, los S7 permiten la transmisión en vivo a través de YouTube, para quienes deseen hacer ‘Streaming’ de su vida o de cualquier evento.

TouchWiz, el aporte de Samsung encima de Android

TouchWiz es la interfaz de Samsung para el Galaxy S7 y el S7 Edge. Foto: Computerworld / IDG

TouchWiz es la interfaz de usuario que Samsung coloca por encima del sistema operativo del teléfono, y en esta ocasión la han refrescado para su uso con Android Marshmallow.

Qué tan útil - o qué tan molesta – resulte esta interfaz dependerá de cada usuario y de qué tan acostumbrados estén al entorno de Samsung o al entorno nativo de Android.

Ahora, ¿Qué hace TouchWiz? Cuando se desliza hacia abajo desde la parte superior de la pantalla, se muestra el grupo habitual de notificaciones, junto con una fila horizontal de botones de programación de acceso rápido bien elegidos: WiFi, Ubicación, sonido, Auto-rotación y Bluetooth.

Al deslizar por segunda vez hacia abajo, en lugar del menú Ajustes completos de costumbre, el teléfono presenta filas de ajustes de acceso rápido a los botones personalizables. Si quieres algo que no está en esa matriz, puedes hacer clic en el engranaje, como de costumbre, para llenar estas filas con la lista de configuraciones de Android.

TouchWiz tiene algunos trucos para reducir el tamaño efectivo de la pantalla para su operación con una sola mano. En la pantalla principal, la ventana de búsqueda en Google se ubica a un tercio de la pantalla, en lugar de en la parte superior. El selector de aplicaciones está a la derecha de la fila inferior, en lugar de por el medio.

Tal vez el truco más simpático, sin embargo, está en los teclados. Samsung ha aprovechado su alto número de píxeles y la resolución de su pantalla para reducir el tamaño del teclado de una manera que el usuario no se vea obligado a llegar a todo el ancho de la pantalla para escribir, facilitando efectivamente la escritura con una sola mano.

El teclado se extiende alrededor de las tres cuartas partes de la pantalla e incluye una quinta fila numérica; y lo mejor de todo es que puedes elegir de qué lado del teléfono aparece en el teclado, lo que facilita las cosas para quienes usan más una u otra mano.

La parte más molesta de TouchWiz viene en el peor lugar posible: cuando se hace la configuración inicial del teléfono. En primer lugar se debe establecer los ajustes de identidad de Google, lo que es muy necesario porque Android requiere acceso a la identidad de Google para algunas de sus funcionalidades.

Luego, sin embargo, el teléfono pide crear una cuenta de Samsung ‘para obtener el máximo provecho de su dispositivo’, lo que parece implicar la descarga de aplicaciones, incluyendo la ‘app’ de Salud Galaxy S y algunas ‘características mejoradas’ que no son explicadas durante la configuración.

¿Y el precio?

La fijación de precios, como siempre, depende de cada país y de cada operadora de telefonía. En Estados Unidos, el precio sin un plan de operador está entre los USD 670 y los USD 800, pero son precios de los teléfonos en las operadoras estadounidenses Verizon y AT&T.

Al menos en una primera etapa, los teléfonos no estarán disponibles en estado ‘desbloqueado’, algo cada vez más usual en los teléfonos de gama alta.

El veredicto


Video: YouTube. Canal: Samsung Mobile.

En los últimos dos años, los teléfonos Android han ido ganando en potencia y sofisticación, y la serie Samsung S7 es hoy por hoy uno de los principales teléfonos existentes en el mercado.

El hardware es bastante bueno: impermeabilización, botones en los lugares adecuados, batería de larga duración, capacidad de expansión, una pantalla de altísima resolución y un montón de potencia de procesamiento (64% mayor respecto a sus antecesores).

El software también es bastante bueno: mejoras en la interfaz propia de Samsung y una fusión mayor de dicha interfaz con el último sistema operativo Android.

Hay problemillas menores (como la colocación del sensor de huellas dactilares, que parece haberse convertido en un estándar en Samsung y Apple) pero son sólo eso: problemillas.

El Galaxy S7 y S7 Edge han fijado un listón muy alto para el resto de la industria. Cualquiera que sea la plataforma de tu preferencia, definiticamente estos son los teléfonos que llevan la delantera.