Los luchadores sacan pecho al decir que practican uno de los deportes más completos. Por eso es común escucharlos que tienen la fuerza de un pesista, la resistencia de un atleta, la agilidad de un gimnasta y la velocidad mental de un ajedrecista.
Lo cierto es que la lucha olímpica, en sus modalidades libre y grecorromana, forma física y emocionalmente a las personas. De eso da fe Rosa Viteri, de 21 años y campeona nacional en distintas categorías desde el 2006. Ella asegura que la lucha no solo le ha dado una condición física envidiable, sino que le ha forjado el carácter.
Su historia sirve para ejemplificar la importancia de este deporte. Cuando Viteri era parte del Colegio Su Cambio por el Cambio, la escogieron para practicar este deporte. Entonces tenía 13 años y al empezar tuvo sus dudas porque le habían contado que era un deporte solo para hombres.
Ahora, la luchadora, que vive con su madre y tiene cuatro hermanos, no concibe la vida sin los tacles, los derribes y las proyecciones de esta añeja disciplina de combate que incluso fue parte de los Juegos Olímpicos de la Antigüedad.
Su siguiente objetivo será ganarse un lugar en la selección ecuatoriana que representará el Ecuador en los Sudamericanos de Chile 2014, en marzo. Para eso se ejercita de lunes a viernes, de 16:00 a 19:00 en el gimnasio de lucha de la Concentración Deportiva de Pichincha. Allí practican también otros 40 deportistas.
Para mantener la forma física, los luchadores corren y hacen pesas en la mañana. Para ellos es fundamental mejorar su masa muscular. En la tarde, en cambio, los luchadores perfeccionan la técnica para someter a sus adversarios durante los combates.
Vinicio Zuleta, entrenador de este deporte desde hace 12 años, asegura que hay una infinidad de técnicas, pues cada deportista incluso le otorga variantes a los movimientos clásicos.
Entre los más populares está el tacle, que es precisamente el preferido de la campeona nacional de los 63 kilogramos.
Viteri es una chica tranquila, de voz suave. Antes de sus combates siente nervios, sobre todo cuando la nombran para acudir a la colchoneta. Pero una vez sobre el círculo de combate se llena de adrenalina y una de sus características es la explosividad. Cuando está frente a otra deportista, sus sentidos se enfocan en colocarla de espaldas para conseguir un triunfo.
En la lucha se gana por puntos, toque de espalda, descalificación o abandono. En categorías menores se realizan dos períodos de dos minutos, con 30 segundos de descanso. Los adultos combaten tres minutos, igualmente en dos tandas.
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Ojo con el dato
En el mundo. Oro olímpico
La japonesa Yoshida Saori, bicampeona olímpica en los 55 kilos, es rival de Antes. También tiene seis títulos mundiales. Otra rival es Jackeline Rentería, colombiana medallista de bronce en Londres.
En el país. Oro bolivariano
Lisset Antes es una de las ecuatorianas con mayores proyecciones. Estuvo en Londres 2012 y este año espera consolidarse en los Juegos Sudamericanos, 55 kilos. Orlando Huacón, Juan Espinoza son otros ecuatorianos destacados.