Un entrenamiento de los judocas que representarán a Francia en los Juegos Olímpicos de Río 2016. Foto: Charly Triballeau/ AFP
El 50 por ciento de los brasileños está en contra de la realización de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro que comienzan el 5 de agosto, reveló un estudio del instituto privado Datafolha divulgado hoy, 19 de julio del 2016.
Según el sondeo realizado entre los días 14 y 15 de julio, el 63 por ciento de los brasileños cree que el megaevento deportivo ocasionará más perjuicios que beneficios al país. La mayoría de los encuestados evaluó que los problemas por los que atraviesa el país en general y Río de Janeiro en particular dan más motivos para avergonzarse de organizar la cita en estos momentos que para enorgullecerse, señaló el diario ‘Folha de Sao Paulo’, vinculado a Datafolha.
Entre los problemas que empañan los Juegos de Río está la crisis económica que llevó a la gobernación regional a decretar el estado de calamidad pública financiera; la inestabilidad política que derivó en el enjuiciamiento de la presidenta suspendida Dilma Rousseff; los graves problemas de seguridad en la ciudad sede; y el temor a que ocurran ataques terroristas.
En la capital fluminense, los cariocas están divididos sobre los beneficios o perjuicios del evento. El 47 por ciento considera que será más perjudicial que beneficioso y el 45 por ciento consideran lo contrario. El rechazo a los Juegos es mayor entre los brasileños que viven en las regiones Sur y Sureste -las más ricas y desarrolladas-, los que tienen mayor nivel de instrucción y mejor renta familiar, con entre cinco y diez salarios mínimos.
El salario mínimo brasileño es de 880 reales (unos USD 275). Los más jóvenes y los brasileños que viven en las regiones más pobres del país, el Norte y el Noreste, son los que demostraron apoyar con más entusiasmo la realización en el país de la mayor cita deportiva del mundo.
Datafolha entrevistó a 2 792 personas mayores de 16 años en 171 municipios de todo el país. Un municipio brasileño puede abarcar una o varias ciudades. El margen de error del estudio es de dos puntos porcentuales hacia arriba y hacia abajo.
