Los encuentros se realizan en una cancha de tierra durante los fines de semana, entre las 08:00 y las 13:00. Fotos: Cortesía Selva Producciones
En las cercanías del río Bobonaza, en Pastaza, se disputan intensos partidos del Campeonato Intercomunitario de Fútbol Sarayaku Kawsay Sacha. Durante los cotejos, los gritos de hombres y mujeres del pueblo originario kichwa irrumpen en el silencio de la selva.
El torneo se realiza desde noviembre, durante los fines de semana. Reúne a clubes de las comunidades Shiwa Cocha, Sarayakillo, Cali-Cali, Chontayacu, Maukallacta, Ushillo Urku y Sarayaku Centro. Los líderes de estas siete comunidades conforman el consejo de gobierno Tayjasaruta.
Marlon Santi, líder de Sarayaku, explica que el campeonato busca estrechar los lazos de unión y confraternidad entre las diferentes comunidades. El torneo culminará en febrero del próximo año con la disputa de las finales.
El estadio en el que se disputa el certamen se encuentra cerca de la pista de aterrizaje de Sarayaku. Al lugar se puede llegar en balsas.
A los alrededores del escenario llegan los aficionados -con pantalonetas, camisetas y maletas con zapatillas de lona o botas de cuero- en las jornadas de los fines de semana. Las mujeres visten falda, blusa y de sus cuellos cuelgan multicolores collares elaborados con piedras y semillas. En tanto que en los costados de la cancha es usual ver a niños jugando con una pelota.
Santi explica que algunos de los jugadores que refuerzan a los clubes Juventudes, Atayak, Selvas Producciones, Shiwakucha pertenecen al Club Deportivo Sarayaku. El equipo profesional de la comunidad juega en el torneo de Segunda Categoría de Pastaza. Los amazónicos debutaron en la segunda categoría de la Asociación de Fútbol no Amateur de Pastaza, en mayo del 2014.
Jugadores del club Atayak (verde) se despiden del árbitro, tras un encuentro. Foto: Cortesía Selva Producciones
Mientras que otros futbolistas dejan de lado sus actividades como la caza, la agricultora y el cuidado del bosque para disputar los partidos. “Sarayaku es una gran familia que gusta distraerse y compartir. Algunos chicos que pertenecen a la escuela de fútbol también están involucrados en estas actividades”, asegura Santi.
‘Los hijos del Jaguar’ se entrenan en la plaza central y en el estadio de la comunidad. Los niños y jóvenes se desplazan con agilidad por los campos de arena y por el fango. La lluvia no es impedimento para entrenarse o jugar los encuentros del torneo.
José Gualinga, habitante de Sarayaku, asegura que la comunidad continúa haciendo historia entre los pueblos indígenas de la Amazonía. Desde ahí, promueven mensajes de vida y defensa de la naturaleza con la disputa de los cotejos del ‘rey de los deportes’.
“El fútbol une a nuestras comunidades y es una gran oportunidad para que Sarayaku traslade sus mensajes. Todo esto se realiza en un contexto intercultural y con una propuesta distinta para entender el Sumak Kawsay o Buen Vivir”, asegura Gualinga.
Uno de los reglamentos del Campeonato Intercomunitario de Fútbol Sarayaku Kawsay Sacha es que los clubes cuenten con dos jugadores de otras comunidades. Ellos son considerados ‘extranjeros’.
Los jugadores también pueden ser considerados como nacionalizados luego de jugar dos temporadas en el campeonato.
El equipo de Selvas Producciones intenta revalidar el campeonato que alcanzó en el 2015, en una jornada final que atrajo la atención de los habitantes de la localidad y que se disputó bajo una llovizna.
El torneo actual se encuentra en la fase de clasificación a las semifinales, explica Emilio González, habitante y docente de la comunidad Sarayaku.
En la primera parte del Campeonato se jugaron partidos de todos contra todos. La fecha y los días de los partidos, que se realizan entre las 08:00 y 13:00, se publican en la cartelera de la comunidad.