Optimismo y mesura

optimismo y mesura

optimismo y mesura

El exceso de confianza en el fútbol siempre ha sido un búmeran. Es temerario salir a una cancha pensando que el rival es frágil, fácil de vencer… Eso es parte de la historia, de argumentos caducos… que no son usuales en el mundo. Por eso es necesario ser mesurados, cautos (esto último algo tácito en la vida), pero llenos de una vitalidad que permita mantener esa ambición para lograr metas.

Ese es el escenario que necesita la Selección en estos días y, diría, siempre; en donde es vital mantener una estima que rebose de optimismo, sin pasar al exceso. Y que esto no sea solo con los integrantes de la Selección, sino en la misma comunidad que se alista para ir al estadio Atahualpa (el martes 26) y también para ver por la televisión el partido de la Tri ante Paraguay.

Marlon Ayoví, mediocampista y que fue también capitán de la Selección que jugó dos mundiales, desglosa en una entrevista (página 14) cómo mantener la calma en estos partidos. Él resume la actuación de la Tricolor en la siguiente frase: "Ellos tienen que seguir soñando y hacernos soñar con una buena clasificación". Partiendo de esta observación, el equipo actual se parece mucho a los anteriores que fueron a las dos Copas (2002 y 2006), pero podría superarlo si logra la clasificación ya que esta última semana este grupo de futbolistas puso al país en el undécimo puesto a escala mundial, en el escalafón de la FIFA.

¿Cómo lograr ese propósito? Reinaldo Rueda se acoge a esa premisa de ser ambicioso y cauto, en la vida. Elogia al grupo humano de futbolistas y les enseña a ser mejores personas. "Ellos tienen familias y hay que mirar por ellas también. Pero si ganan, darán alegría a millones de ecuatorianos". Esa es la respuesta del seleccionador. Ante eso, es necesario mantener esa línea positiva, respetando a los adversarios y alentando a los seleccionados. Y sobre todo ser precavidos ante el rival.

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