Lionel Messi solo requiere unos centímetros para mostrar su calidad. Es un crack con una técnica envidiable. Y esa la puso en práctica en el partido que la Selección de Argentina ganó 2-1 a Australia y que le dio la clasificación a los cuartos de final, en el estadio Ahmad Bin Ali, en el Mundial de Qatar 2022.
‘Leo’ es más práctico, es de esos jugadores que enloquece a sus rivales y también a los fanáticos argentinos que no pararon de cantar en el partido de los octavos de final, este 3 de diciembre.
Y una de esas jugadas que generó fue en el minuto 64, en la cual recibió el balón desde los tres cuartos de cancha y llegó hasta la zona de penal, driblando a los que se les pasaban por el camino.
Antes de esa acción, Messi generó su gol (35 minutos), el primero de su país, que fue bien trabajado por él, ya que lo empezó y la terminó en un espacio corto, definiendo con un remate bajo al sector derecho del golero. Ese es su estilo, su impronta, la marca Messi, que revolucionó el fútbol.
Ahora hay un Messi más funcional para el equipo, que puede jugar en espacios cortos y largos.
Argentina ganó bien pero sufrió. Pero eso no le importa a sus hinchas que quieren ver a su país en otra final de un Mundial.
Sus hinchas transmiten energía, que contagia a los que llegan al estadio. Ellos no paran de cantar, gritar y tocar tambores.
A sus 35 años, Messi juega con una actitud de un veinteañero; a los 89 minutos pidió el balón y se sacó la marca de tres jugadores australianos, lo que desató gritos de respaldo. También dio pases gol que no pudo definir Lautaro Martínez.
Y también aplicó otras formas de hacer paredes y rematar. Fue la noche de Messi, ese ídolo que adora Argentina y también el mundo.
Unos argentinos lo llegaron a comparar con Diego Maradona. “Fue un maestro en la cancha”. Y esa gestión que hizo recibió la recompensa porque la Comisión Técnica de la FIFA lo designó jugador del partido, premio con el que se presentó en la conferencia de prensa.
Messi brilló en la cancha y en las gradas, donde corearon su nombre. Fue ese jugador desequilibrante, que le inyectó energía a su equipo, que motivó a sus compañeros, al punto que después del partido buscó al golero Emiliano Martínez que evitó el empate en los minutos adicionales del partido, que lo ganó la Selección de Argentina, con goles de Messi y de Julián Álvarez, por 2-1.
Ahora se viene un duelo más complejo. Messi se enfrentará a Países Bajos, por un cupo a las semifinales, en un partido que será el viernes 9 de diciembre, en el estadio Lusail.
¿Puede dar más Messi?
Probablemente sí. Anda enchufado. Anda concentrado y busca la revancha del Mundial 2014. Su fútbol está intacto, con calidad y técnica, y, sobre todo, con una visión de generar acciones para sus compañeros.
Exjugadores que fueron invitados por la FIFA, como Hristo Stoichkov, exBarcelona, cree que sí. “Veo a Messi bien concentrado”, comentó al salir del estadio Ahmad Bin Ali.
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