Los pilotos británicos Lewis Hamilton y Jenson Button lograron ayer el doblete para el equipo McLaren en el Gran Premio de Fórmula 1 de Turquía. Esto, al aprovecharse del polémico choque entre los autos Red Bull del australiano Mark Webber y del alemán Sebastian Vettel, cuando lideraban la carrera.
Webber cerró el podio detrás de los McLaren y es líder del campeonato en solitario, pese a su golpe con Vettel. Suma 93 puntos, mientras que Button 88 y Hamilton 84. En la vuelta 40, Vettel atacó en una recta la primera plaza que ostentaba Webber. Se tocaron y el doblete se esfumó. El alemán tuvo que retirarse y el australiano, tras cambiar el morro del coche, por lo menos pudo salvar la tercera plaza.
Mientras tanto, el español Fernando Alonso fue octavo con su Ferrari y también se benefició de la increíble batalla entre los Red Bull, de cara a la lucha por el campeonato. Alonso ya es cuarto en el Mundial, con 79 puntos, uno más que Vettel.
El alemán Michael Schumacher acabó en el cuarto puesto en Turquía, la mejor posición desde su regreso a la Fórmula 1.
Hamilton logró su primera victoria del año y la tercera para su equipo en el2010. No era el primero en ver la bandera de cuadros desde Hungría 2009. En su trayectoria suma ya 12 triunfos.
En la partida, Vettel y Schumacher aprovecharon que salían por la parte limpia para adelantar respectivamente a los McLaren de Hamilton y Button. Pero poco después, los británicos hicieron valer la velocidad punta de sus bólidos, gracias al conducto F para recuperar sus posiciones. El dispositivo da una velocidad extra en las rectas al bloquear el flujo de aire que llega al alerón trasero. En el circuito de Estambul, ese flujo se reveló vital. Pese a las imitaciones, ningún equipo consiguió hasta ahora el funcionamiento de McLaren. Hamilton se pegó a Webber, demostrando que esta vez Red Bull iba a sufrir para obtener el triunfo.
Los Ferrari de Felipe Massa y Alonso no adelantaron posiciones en las primeras curvas. El español seguía duodécimo, plaza desde la que partió, tras las 10 primeras vueltas. En la 12, el bicampeón mundial entró en boxes a cambiar ruedas, ganó dos posiciones, al japonés Kamui Kobayashi (Sauber) y al alemán Adrian Sutil (Force India), y se situó décimo.
Hamilton convirtió la persecución a Webber en acoso. En cabeza, Vettel fue el primero en cambiar gomas en la vuelta 15. Webber y Hamilton entraron el mismo momento en los boxes. La primera plaza la iba a decidir la velocidad de los mecánicos. El australiano la defendió y el inglés perdió unas décimas básicas incluso para perder la segunda plaza ante Vettel.
Los dos Red Bull y los dos McLaren mantenían un pulso a cuatro. La predicción de una posible tormenta fue lo único que alteró una carrera hasta ese momento tranquila, sin sobresaltos, sin adelantamientos y casi sin abandonos.
La lucha más interesante estaba entre Vettel y el agresivo Hamilton por la segunda plaza. Solo Red Bull podía perder un doblete hecho. Y la escudería ‘energética’ se suicidó. A 18 vueltas para el final, Vettel trató de adelantar a Webber en una de las rectas. Ambos se tocaron. El alemán quedó fuera de carrera y le echó la culpa a su compañero, al que tildó de ‘loco’ llevándose el dedo índice a la sien.
El australiano tuvo que cambiar el morro de su coche, pero se mantuvo en carrera en tercera posición.
“Obviamente no soy el hombre más feliz de la tierra”, dijo Vettel, muy molesto. “Nunca deberían haber llegado a esa situación. Depende de los pilotos respetarse y darse el espacio necesario”, dijo Horner.
Del doblete de Red Bull se pasó al de McLaren con Hamilton y Button, cada vez más cerca de su compañero. Una ligera lluvia agregó picante a un final de carrera trepidante. Button adelantó a Hamilton con una gran maniobra.
Pero el campeón del mundo del 2008, tras tocar a su compañero, recuperó la posición. McLaren se arriesgó a cometer el mismo pecado de los pilotos de Red Bull.
Finalmente firmaron la paz y sellaron el doblete. “Fue una carrera emocionante. Sabíamos que teníamos buen ritmo de carrera y que podíamos estar con los Red Bull. Jenson y yo tuvimos una buena pelea. Por suerte pude volver a pasarle”, dijo Hamilton.
“Fue divertido”, constató Button, que confirmó que al final ambos tuvieron que ahorrar combustible para poder llegar a meta. “Hemos luchado justamente. ¿Quién quiere un accidente?”, dijo Button hurgando en la herida de Red Bull.
Por detrás, Alonso adelantó al final al Renault del ruso Vitali Petrov y logró la octava plaza y cuatro valiosos puntos. Pese a que Alonso salvó cuatro puntos, se mostró sumamente molesto con su auto.
“Nos ha sorprendido, tanto en Barcelona como aquí, no ser competitivos. Estamos a nivel de Renault y no es suficiente. McLaren y Red Bull están muy lejos y no sabemos si será suficiente”, dijo Alonso, ex bicampeón mundial.
Red Bull sufrió una ‘sobredosis’
Frustración y reproches en lugar de fiesta. Manos vacías en lugar de trofeos. La escudería de Fórmula 1 Red Bull fue ayer víctima de la excesiva energía que pusieron sus dos pilotos y que privó al equipo de un doblete en Turquía.
En la vuelta 40, el australiano Mark Webber dominaba por delante de su compañero, el alemán Sebastian Vettel, que trató de superar a su íntimo rival. Ambos colisionaron. Adiós al doblete de Red Bull y hola al de McLaren.
El alemán de 22 años defendió su inocencia frente a los medios. Antes, salió del coche molesto y haciendo gestos con los que tildó de ‘loco’ a su compañero de 33 años, líder del Mundial pese a todo.
“Creo que no estaba demasiado ansioso. Tenía la sensación de que era un poco más rápido, por lo que he aprovechado mi oportunidad. Estaba en la parte interior, mas no se puede decir”, dijo Vettel, quien agregó: “Que pase esto precisamente entre compañeros es estúpido. Se debe dejar siempre el sitio necesario”.
Webber habló poco sobre esta polémica: “Fue un maldito desastre”, expresó. “No he hecho ninguna locura. De manera inesperada se fue a la derecha”, dijo Webber, que se quitó también la culpa de encima.
El problema de Red Bull es que sus dos pilotos son rivales por el título del mundo; de hecho, ambos llegaron a Turquía empatados a puntos en la cabeza del campeonato.
Vettel suma un triunfo por los dos de Webber, que buscaba en Estambul el tercero consecutivo y que ha puesto en duda el liderazgo que Vettel tenía en Red Bull por haber acabado el año anterior en segundo lugar.
“Luchamos por victorias y claramente hay mucho en juego. Tendré una conversación con Vettel. Quizás tengamos opiniones diferentes, pero somos adultos”, aseguró Webber.