Desde la izquierda: Magaly Bonilla, Daniel Pintado, Gilson Loja y Paola Pérez se entrenan en la pista de Cuenca. Xavier Caivinagua para EL COMERCIO
Una sensación de optimismo se percibe en los entrenamientos. El grupo está motivado. Con distintos planes de preparación, 16 seleccionados afinan su técnica para el Mundial de Marcha por equipos que será entre el 4 y 5 de mayo en Taicang, China.
En Cuenca, con horarios matutino y verpertino, 10 andarines (nueve de Azuay y uno de Bolívar) se alistan en las pistas del estadio Jefferson Pérez y del parque de La Madre. También lo hacen en los páramos de El Cajas, en altitudes de 4 000 metros. Hay otros sitios que utilizan para recorrer rutas de 30 y 40 kilómetros.
Los demás se entrenan en Quito, Ibarra y Loja, previo al viaje con destino a China. El martes 23 de abril de 2018, 15 andarines y seis técnicos se verán en el aeropuerto José Joaquín de Olmedo, en Guayaquil. De allí, a las 18:45, se trasladarán al país asiático, en donde se unirá Andrés Chocho, quien se prepara en España con el estratega José Marín.
En los últimos días, Daniel Pintado prioriza la parte técnica. El martes pasado, por ejemplo, trabajó con vallas y marchó en forma zigzagueante por los ocho carriles de la pista sintética. Su objetivo: mejorar la flexibilidad de su cadera para no perder contacto con el piso en el momento de la competencia.
Por falta de resultados en el 2017, Pintado salió del Plan de Alto Rendimiento y dejó de recibir cuatro salarios básicos unificados. Se mantiene en actividad con el apoyo familiar. Ahora se traslada en bus a las prácticas porque vendió su moto. Cursa el tercer ciclo de Marketing en el Instituto Tecnológico Sudamericano, donde estudia de 18:00 a 22:00.
Según Julio Chuqui, técnico de Pintado, Magaly Bonilla y Johana Ordóñez, antes del viaje a Taicang se afinó la técnica. Se bajó los volúmenes en cuanto a las distancias con las mujeres: de 40 kilómetros se redujo a 30 km al día, en dos sesiones. El varón hace 20 km.
China tiene 13 horas de adelanto con Ecuador. En ese sentido, Chuqui reconoció que el viaje con 10 días de anticipación les permitirá adaptarse sin mayor problema al huso horario. Luego del viaje y la readecuación del organismo, el próximo sábado se retomarán los entrenamientos en Taicang, de forma moderada.
El estratega está consciente que es difícil acostarse a dormir en horarios que normalmente se entrena o se cumplen actividades académicas. “Vamos a llegar con un tiempo prudente como para que el organismo se reacomode y pueda responder a las exigencias”.
El quiteño David Hurtado, por su parte, pone énfasis en la adaptación al huso horario. Desde hoy tenía previsto entrenarse en la madrugada (de 24:00 a 02:00) para dormir durante el día. Igual lo hará mañana, antes del viaje. Su meta es subirse al podio.
Su entrenador, Xavier Cayambe, está optimista porque David ha mejorado los tiempos en las últimas competencias y los exámenes de laboratorio confirman que está en óptimas condiciones. También sigue un régimen alimenticio especial y ha bajado dos kilos, que es un factor favorable. Previamente se entrenó en Guayas y Cotopaxi.
Luis Chocho, técnico de Claudio Villanueva, Paola Pérez, Darwin León y Gilson Loja trabaja en horario nocturno con sus alumnos, desde anteayer. “Con Jefferson Pérez entrenamos en la madrugada para alcanzar la medalla de oro en el Mundial Juvenil de 1992 en Seúl. Lo conseguimos”.
Con esa experiencia adquirida, Chocho define como buenos equipos a los de 20 km varones y 50 km damas. “Tienen posibilidades de subirse al podio o de ubicarse entre los cinco mejores del mundo”. Sobre la incorporación de Paola Pérez al conjunto de 50 km, el DT recordó que el año pasado ya cubrió 35 km y esa participación sirvió de parámetro.
Magaly Bonilla, quien el pasado 10 de marzo se proclamó campeona sudamericana en la distancia de 50 km, reconoció que es complicado adaptarse a un país como China, que está adelantado con 13 horas y que tiene una cultura diferente. Sin embargo, aplaudió la decisión de viajar al país sede con 10 días de anticipación.
Ella está convencida que no tendrá problemas con la adaptación al huso horario. La andarina azuaya es cuarta en el ‘ranking’ mundial de los 50 km, con un tiempo de 4:39:28.